La aventura del madrileño Carlos Fonseca en Bolivia
El técnico dirigió a Real Potosí en 2021 y ahora busca otro club de Primera División con el que terminar año. Narra sus vivencias en el fútbol boliviano para Diario As.
Carlos Fonseca ha recorrido diferentes países del mundo para llevar sus conocimientos como entrenador. Desde el fútbol base madrileño a Arabia Saudí o Estados Unidos antes de llegar a Bolivia: “En 2018 estuve dando capacitaciones en Real Santa Cruz, ahí conocí a mi agente y ahora ya es mi amigo. En 2021 me llamó para dirigir a Real Potosí nada más regresar de Arabia Saudí”, narra el técnico para Diario As.
En estos momentos se encuentra en el país sudamericano, en busca de otra oportunidad en la primera división del país sudamericano. Allá tuvo su primera experiencia en 2021, en Real Potosí y al mismo club volvió para intentar devolverlo a la élite: “Me llevo muy bien con la afición, montamos un buen equipo. La gente estaba muy contenta y el ejemplo es que me han vuelto a llamar. Sin embargo, llegué y el campeonato se suspendió. La liga y la Copa Bolívar”, se lamenta. Viajó con la expectativa de dirigir y ahora, si no aparece otro club, deberá esperar al mes de enero para regresar a Potosí. “Me he quedado tres o cuatro semanas más para buscar una oportunidad en algún equipo, si no me volveré a Madrid y en enero volvería a Real Potosí”, asegura durante la entrevista.
La experiencia en Real Potosí
Sobre esa primera experiencia en Potosí, Fonseca encuentra sensaciones dispares: “Potosí es una ciudad pequeña, el equipo lo llevan los mineros. Son algo fastidiosos. No entienden de juego y solo ponen la plata y creen que tienen poder sobre ti. Llegué en pretemporada y pudimos confeccionar la plantilla. Sin embargo aquí el mercado de fichajes es un poco loco. Se fueron cuatro jugadores extranjeros a pocos días de empezar el campeonato. Por suerte pude realizar los últimos fichajes y finalmente conseguí mejor equipo”.
Además, describe la clara desigualdad de los grandes clubes del país respecto al resto de conjuntos: “La primera división es complicada porque hay tres o cuatro equipos que tienen mucha plata y luego están los de bajo coste. Aunque los chicos tienen buen salario faltan recursos, instalaciones...un poco desastre. Los clubes son muy básicos. Tres empleadas en la oficina, presidente, vicepresidente y el delegado. El salario de Granell en Bolívar era lo que sumaba Real Potosí para todo el club, jugadores, directivos, técnicos...”
Falta de profesionalidad
Por otro lado, también se mostró crítico con la profesionalidad de los jugadores: “Los jugadores no se cuidan. Hay que tener cuidado de que duerman, de que no metan alcohol en el hotel...Solo por prohibir el alcohol pueden dedicarse a que te destituyan para que llegue otro técnico”. Todo ello a pesar de la dureza con la que trabajan los técnicos bolivianos, tal y como ejemplifica el madrileño: “Aquí hay una cultura de tratar mal al jugador. He tenido jugadores de selección que ni me miraban a los ojos, tenían miedo del entrenador. Son muy agresivos”.
Su estilo y La Verde
Sobre su estilo de juego, aunque tienes unas preferencias claras, Fonseca se muestra realista en este aspecto: “Yo me adapto, no vengo con un sistema. Lo que trato de hacer es encajar a los mejores. Me gusta el 3-4-3. Son más sólidas para el desorden. Las líneas aquí están muy separadas y aquí se ven errores propios del fútbol base”.
Por último, sobre el La Verde y su futuro a medio plazo se muestra algo pesimista: “Bolivia quiere resultados ya. En España hay una organización con los jugadores desde muy pequeños. Aquí aunque existen los semilleros no hay base y así no van a tener nunca mejores jugadores. Los jugadores de selección están o en la liga o en segundas divisiones como Grecia, en Sudáfrica...”