Kubo volverá tocado, pero ambicioso

Takefusa Kubo, el único jugador de la Real Sociedad que ha disputado el Mundial, ya está de vuelta de Qatar. Eliminada su selección, Japón, toca ya establecer el camino de regreso para reincorporarse a la dinámica de trabajo en Zubieta. Pero tardará todavía un poco en hacerlo, porque tendrá dos semanas de vacaciones para recuperarse del esfuerzo de la cita mundialista, en la que jugó dos partidos como titular, otro no salió por decisión técnica, y el último estaba enfermo con gripe y no pudo estar ni en la lista de convocados. Está previsto que el jugador nipón se reincorpore al trabajo de Zubieta el 19 de diciembre, dos días antes de la cita copera en Coria, donde lógicamente no debería estar en la convocatoria. Kubo regresa “tocado” por haberse perdido el partido de Japón contra Croacia por una proceso gripal que le obligó, incluso, a ver el partido por televisión desde su habitación en el hotel de concentración; pero ambicioso para seguir logrando metas importantes con la Real. “Quiero ayudarle a que sea un habitual de la Champions”.

“Gracias por su apoyo. Y lo siento. Fue muy frustrante ver tu partido más importante en la habitación. Me gustaría dar las gracias a todos mis compañeros y personal que lucharon conmigo”, fue el mensaje que dejó Kubo en las redes sociales después de la eliminación de Japón en el Mundial de Qatar. Ahora tendrá dos semanas merecidas de descanso para después recuperar su buen nivel de juego y forma a partir del 19 de diciembre. En la Real se ha convertido en un jugador importante para el ataque de Imanol Alguacil. Deberá levantarse de una experiencia que ha definido como “incompleta” en Qatar. “A diferencia de los Juegos Olímpicos de Tokio, esta vez me siento un poco incompleto. En los Juegos Olímpicos pude hacer lo que quería hacer, así que personalmente estaba satisfecho”, ha señalado en declaraciones a los medios de su país.

Su siguiente reto con su país serán los Juegos Olímpicos de 2024. “Si tengo la oportunidad, me gustaría participar. Podré jugar y si puedo, me gustaría darlo todo. Quiero lograr algo con la selección, quiero ganar con la selección nacional”, sentencia tajante y ambicioso. Porque la ambición de Kubo no tiene límites. Con su país y con su club, la Real. “Quiero ayudar a hacer de la Real Sociedad un elemento habitual en la Liga de Campeones”. Ahora cambia de chip y piensa a lo grande con el club donostiarra. Pero antes, desvela una anécdota con su seleccionador del último partido ante Croacia. No pudo ir al estadio y se quedó en su hotel, pero recibió antes una visita especial. “No sería extraño que se olvidara de mi existencia, pero llegó a verme como una muy buena persona”.