José Alberto se queda sin lateral izquierdo
Eneko Satrústegui se rompe en los isquiotibiales y se suma a la baja de Saúl García. Mantilla y Mario García son los candidatos a ocupar su plaza
Eneko Satrústegui tiene por delante entre tres y cuatro semanas alejado de la competición, tras confirmarse que padece una rotura de fibras de Grado II en el músculo semimembranoso, uno de los isquiotibiales en la parte posterior de su pierna izquierda. El desgarro llega en el peor momento posible, justo en el momento en el que está recuperándose de una lesión similar el otro lateral izquierdo de la plantilla, Saúl García, y a solo cuatro días del crucial partido con la Ponferradina, rival directo del Racing en la lucha por eludir el descenso y con que está empatado a puntos.
El martes de la semana pasada los isquios de la pierna izquierda dieron un primer aviso al navarro, como prueba la fotografía que encabeza este artículo, en la que Eneko va tocándose la zona del semimembranoso justo tras abandonar el entrenamiento en el que estaba junto a sus compañeros. La profesionalidad de Satrústegui, ante la necesidad que tenía el equipo de su concurso frente al Tenerife (y la oportunidad que suponía recuperar la titularidad ante la lesión de Saúl), le hizo volver al día siguiente a los entrenamientos y jugar los 90′ el sábado frente a los chicharreros. Ahora, desgraciadamente, el músculo ha dicho basta y el navarro hoy ya no ha podido entrenar con sus compañeros.
La evolución de Saúl García, rotura de Grado I, más leve, en el bíceps femoral de la pierna derecha, en el partido de hace dos semanas ante el Alavés, va por buen camino y tanto en la sesión de ayer en La Albericia como hoy en El Sardinero se le ha visto ya correr y ha comenzado a tocar balón. Si no hay una recaída en la rehabilitación, parece claro que José Alberto le tendrá en plenas condiciones para el duelo en los Campos de Sport frente al Leganés del lunes 13 de febrero (21:00). Forzar para que pueda jugar en El Toralín este domingo parece demasiado arriesgado. Si fuera un final (aunque lo pueda parecer, no lo es), se podría asumir correr el riesgo, con Satrústegui de baja para las tres o cuatro jornadas posteriores, lo lógico es ser cautos con el de Vioño.
Con los dos único laterales zurdos de la plantilla en la enfermería, a José Alberto se le plantea la disyuntiva de dar la alternativa a Mario García, jugador del filial y especialista en el puesto, o acoplar ahí a uno de los laterales derechos, Unai Medina o Álvaro Mantilla, más experimentados, pero jugando a contrapié. A favor del chaval de Peñacastillo juega la trayectoria del míster en el Sporting (”nunca me ha temblado la mano a la hora de dar oportunidad a un chaval de la cantera”) y a que el estilo de juego de José Alberto demanda laterales que percutan por banda, doblando a los extremos, la especialidad de Mario, con gran centro en carrera y todavía mejor disparo a puerta desde fuera del área. Los otros dos, además, son diestros. En contra de su estreno en el primer equipo conspira la gran trascendencia de los puntos en juego y la mayor capacidad defensiva de Medina y Mantilla. El camargués ha sido el que más minutos ensayó esta mañana en la banda izquierda.
En la parte positiva de la matinal en El Sardinero hay que anotar, aparte del estreno como racinguista del croata Roko Baturina, la vuelta a los entrenamientos de Rubén Alves. El central hispanobrasileño sufrió un esguince de tobillo en el partido contra el Tenerife del sábado y no pudo participar, todavía dolorido, en los entrenamiento del domingo y del martes. Hoy sin embargo, aunque con evidentes síntomas de cojera a simple vista, ha completado tres cuartas partes de la sesión, partidillos incluidos. Los cuatro días que restan hasta el partido debieran permitirle superar las molestias que todavía sufre y llegar a tiempo para medirse a la Ponferradina. Buena noticia para José Alberto, que podrá contar con el futbolista más regular de su plantilla en lo que llevamos de temporada.