Joan Pol: “Sabía que ese penalti lo podía parar”
El portero mallorquinista para el penalti decisivo para dar la Copa del Rey Juvenil a su equipo
Si por algo se está caracterizando la actualidad mallorquinista en los últimos días es por las intervenciones de sus porteros en los lanzamientos de penalti de los rivales.
Y el último ejemplo ha sido el meta juvenil Joan Pol en la tanda de penaltis de la final de la Copa del Rey de la categoría.
Hace unos días, Dominik Greif clasificó al Real Mallorca para la Copa del Rey tras detener dos penaltis a la Real Sociedad en semifinales, uno en los 90 minutos de partido, y otro en la tanda de penaltis. Días después fue el turno de Rajkovic que también le paró un penalti al barcelonista Gündogan en partido de liga, y ahora el joven Pol le ha dado el título de Copa a los bermellones al detener el cuarto lanzamiento del Espanyol que ya había fallado uno anterior lanzado al larguero.
Pero no es la primera vez que Pol resulta ser el héroe de su equipo. Precisamente el Mallorca juvenil llegó a la Final-Four de la Copa del Rey gracias a otra intervención del meta que en la tanda de penaltis de los cuartos de final contra el Deportivo de la Coruña, también detuvo el lanzamiento decisivo que clasificó a los bermellones.
Pol se considera un especialista: “es uno de mis puntos fuertes, los penaltis, las tandas, no siento presión y eso es algo que al final puede beneficiar al equipo como así ha servido para ganar el título”, añadiendo que “yo ya sabía que ese lanzamiento lo podía parar, estaba muy convencido y así ha sido”.
Sobre el partido, el héroe de la final apunta que “la hemos vivido de una manera muy especial, hacía más de 20 años que no llegábamos a una final y siento un orgullo máximo, y ha sido contra el Espanyol que ha hecho un partidazo y que se merecen todo y más”. Según el meta mallorquinista “es muy difícil hacerle daño al Espanyol, en los noventa minutos dimos un poco más para ganar, pero ellos en la prórroga ha apretado porque son un equipazo, no tengo palabras, este título es un orgullo muy grande y me gustaría que se nos recordara como nosotros hemos recordado a otras generaciones que lo intentaron y no pudieron conseguir la Copa”.
El partido, disputado en el Carlos Tartiere de Oviedo, acabó con el 0-0 inicial en los noventa minutos y en la prórroga tampoco hubo goles por lo que hubo que recurrir a la tanda de penaltis que dieron la victoria al Real Mallorca por 4 a 2.