NewslettersRegístrateAPP
españaESPAÑAchileCHILEcolombiaCOLOMBIAusaUSAméxicoMÉXICOusa latinoUSA LATINOaméricaAMÉRICA

MUNDIAL 2030

Irarragorri: “El proyecto es de todos y dejó de ser del Sporting; es una oportunidad”

El presidente del Sporting mantiene su lucha por sumar al Real Oviedo al proyecto mundialista del estadio El Molinón, que ya fue sede en la cita de 1982.

10-02-24. ALEJANDRO IRARRAGORRI, PRESIDENTE DE ORLEGI SPORTS Y DEL SPORTING, DURANTE LA PRESENTACIÓN DEL PROYECTO DE REFORMA DE EL MOLINÓN.
RSGTV

María Tato, una de las responsables del Comité Técnico de la organización del Mundial 2030, recibió un singular obsequio en Gijón. La dirigente de la Federación Española de Fútbol se llevó una almohadilla del Mundial-82 de las que aún se conservan en alguna estancia del viejo estadio del Sporting. Alejandro Irarragorri, presidente de Orlegi Sports y actual propietario del Sporting, tomó esa almohadilla en sus manos para recordar que el proyecto que pretende convertir de nuevo a El Molinón en sede de un Mundial, en este caso de la cita 2030, “es una oportunidad para Asturias, como lo fue en el 82, cuando hubo sede tanto en Gijón como en Oviedo”.

Y añadió: “Sé que tenemos diferencias en Asturias tanto en aficiones como en política, pero me pregunto que, si no trabajamos en consecuencia con esto, para que sea ésta una nueva realidad, cómo se lo vamos a explicar a nuestros hijos y nietos en 15 ó 20 años. Cómo en el Mundial del 82 pasamos de tener dos sedes en Asturias y ahora no lo logramos. Esto es de todos. Esto dejó de ser del Sporting. Es una responsabilidad muy grande que tenemos todos de hacer este proyecto realidad”.

Alejandro Irarragorri sigue en su pelea por sumar a este proyecto al Real Oviedo, que se mantiene a distancia rodeado de la presión social que siempre ejercen los aficionados que llevan la rivalidad a todos los extremos. El presidente del Sporting celebró tras la presentación el tradicional almuerzo de directivas previo al derbi y recuperado después de unos años de relaciones rotas.

Antes de ese encuentro en el Restaurante Bellavista, a orillas del Cantábrico y la playa de San Lorenzo, Alejandro Irarragorri defendió su proyecto pero sin concretar el modelo de financiación elegido. El presidente del Sporting apuntó que entre los presentes se encontraban representantes de importantes empresas que estudian el impacto económico que tendría el Mundial 2030 en Gijón y en Asturias. Ese estudio, con las vías de financiación, espera que pronto también vea la luz. El Gobierno del Principado y el Ayuntamiento de Gijón son los que lo esperan con mayor interés.

“Tenemos que construir en el presente lo que será el club en el futuro”, particularizó Irarragorri más tarde. “La afición es la dueña del club y hay que cuidar ese patrimonio y, con este proyecto, el club tendría un mejor estadio”, dijo.

Vista del estadio El Molinón, tras la reforma planteada, a orillas del río Piles.
Ampliar
Vista del estadio El Molinón, tras la reforma planteada, a orillas del río Piles.RSG

En lo que se refiere al interés de Orlegi Sports, su presidente afirmó que, “como grupo, no somos constructores ni venimos a un beneficio inmobiliario”. Según él, “el beneficio está en participar en el fútbol y generar valor, tanto emocional como de oportunidades y economías. Tenemos que generar derrama económica en la sociedad en la que estamos presentes y con esto tenemos una gran oportunidad”, insistió.

Y volvió al principio, a propósito de la almohadilla del Mundial-82. “Para entender dónde estamos hoy tendríamos que pensar dónde estábamos en junio de 2022. Entonces se pensaba que había la posibilidad de que España pudiera ser sede de un Mundial, como lo fue en el 82. Había otros países en Europa y otros continentes con ese interés”, recordó Irarragorri.

El presidente del Sporting recalcó que en aquel momento “tuvimos la oportunidad de levantar la mano que hoy nos tiene aquí para considerar a Asturias como una sede”. El empresario mexicano recalcó que, “si no lo hubiésemos hecho, habría un reproche por no haberlo intentado y seríamos meros espectadores de lo que significa ser una sede mundialista. Todo se ve muy fácil, pero esa oportunidad que tiene hoy Asturias hay que valorarla tal como es”.