Iñigo: “¿Mi futuro? No está nada claro, que sea lo que Dios quiera”
El central del Athletic sigue esquivando cuestiones sobre su no renovación en Bilbao y el interés del Barça por ficharle
Iñigo Martínez ha vuelto a comparecer públicamente. La segunda vez este año tras salir a zona mixta en Elche. Dijo aquello de: “Estoy tranquilísimo, en mi sitio, sé cómo funciona el mundo del fútbol, mucho bla, bla, bla... gente hablando sin saber, soy feliz, me encuentro bien”. Ha realizado otro ejercicio de regate tras regate para no tratar el peliagudo tema de si se va al Barcelona, algo que en Bilbao se da por hecho. No hay negociaciones abiertas para renovar con el Athletic y la duda es si el club culé volverá a la carga en enero y si la directiva rojiblanca admitirá una negociación. Lo normal es que acabe en junio y haga las maletas sin un euro de traspaso. “Estoy contento aquí, me siento muy cómodo, mi futuro no está nada claro. Estos temas de mi renovación... no es ni momento ni lugar para hablar. El día que llegue, hablaremos”, se ha despachado en Onda Vasca, para luego agarrarse al tópico de que “lo llevan mis representantes y el club, me mantengo al margen, haciendo las cosas lo mejor posible”, porque cree que “esto te puede llegar a confundir y evito temas de este tipo”.
Lo normal es manejar este tipo de discursos cuando alguien piensa en salir de un club. “Yo voy a seguir a lo mío, defendiendo estos colores hasta el final”, añade para seguir asegurando el afecto de la afición de San Mamés. Por las redes sociales ya se agita que su salida es algo así como una traición, sin llegar al extremo de lo que hizo con la Real Sociedad para dar el salto al eterno enemigo. “Son comentarios que duelen, se habla demasiado, estoy acostumbrado a este tipo de cosas, no me descentro, sabiendo qué debo hacer defendiendo estos colores, intentando dar lo mejor de mí para el Athletic”.
Todo está paralizado en Bilbao, a la espera de que Laporta mueva ficha, puede haber una intentona inminente tras anunciar Piqué su retirada. “Las negociaciones están ahí, mis representantes llevan el tema, haciendo lo mejor para mí y para el club, y el club, lo mismo. Pelearé hasta el final y que sea lo que Dios quiera”. Una frase que ya da pistas sobre el desenlace que se va a producir. Si es Dios el que lo tiene que resolver... “Estoy muy feliz aquí, contento, vengo todos los días con una sonrisa, me siento querido y es lo más importante”. Esta cuestión le hace sentirse incómodo: “Cansa un poco el tema, no le doy muchas vueltas. Toca seguir peleando por este club hasta final de temporada”.
Ayer ante el Real Valladolid entró en las rotaciones, fue suplente, a tres días para que Luis Enrique ofrezca la lista para el Mundial. “Estoy acostumbrado a jugar, verte en el banquillo no gusta, pero son decisiones del míster que tengo que aceptar”. Valverde esgrimió que le dejó descansar por la acumulación de partidos. “Si él lo dijo, así lo será, lo hará pensando en el equipo. Tampoco es que le vaya a dar yo más vueltas”, lanza. Sentencia con rotundidad que se encuentra bien físicamente, sin la más mínima secuela de las molestias en la rodilla que le bloquearon en la pretemporada y el inicio de curso.
Además, tiene palabras de ánimo para un Yuri que llegó a confesar que ya no se divierte jugando al fútbol como antes. “Parecen chorradas, pero te pasan factura. Entre todos intentamos levantarle la cabeza, en todos los trabajos se sufre y aquí, también, somos humanos y hay situaciones que te desbordan. Hay que asumirlo y volver lo antes posible. Lo importante es que cada jugador sepa llevar cada momento sin levantar mucho la cabeza”, reflexiona el central ondarrutarra. Él también aguantó muchos ataques cuando dejó Anoeta. “Con la Real hubo mucho comentarios, te llegan, hay que saberlos llevar, las redes sociales hacen mucho daño”. Pero una vez que aterrizó en Bilbao, todo fueron alegrías: “Desde que llegué, la afición me ha recibido de maravilla, voy como uno más por la calle, estoy muy agradecido a la afición y a esta ciudad, que me arropó desde que llegué”.
Su esperanza es formar parte de la lista definitiva para el Mundial. La espera concluye el viernes. “Es una de las cosas que me ilusionan y me encantaría estar, una oportunidad que no voy a tener nunca. Va a ser complicado estar, pero nunca pierdo las esperanzas, hasta que no la vea, no estoy del todo seguro. Si me veo, encantadísimo y si no, seguiré trabajando para estar en siguientes convocatorias”. Desvela que nunca le ha llegado ninguna información antes de hacerse oficial una lista, “y conociendo a Luis Enrique, todos se enteran por igual... Si hay suerte, iré y a pelear y a dar lo mejor de mí”.