Garcés se plantea pedir la cautelar a la FIFA

El asunto Garcés sigue en plena ebullición. El jugador está convencido de que su bisabuelo nació en Malasia, y no en Argentina como parece demostrar la FIFA. Lo cierto es que, por ahora, no juega con el Alavés y tampoco participa en la dinámica de entrenamientos. Está suspendido para realizar cualquier actividad vinculada con el fútbol durante un año.

El club está a la espera y se coloca en situación de observador. Pide respeto por el jugador y por su presunción de inocencia aunque no quiere entrar en polémicas con un ente tan poderoso como la FIFA. Garcés viajó a Malasia para tratar de resolver el problema en persona y parece que la estrategia decidida, a corto plazo, es pedir la cautelar hasta que el asunto se aclare definitivamente.

Sorprendió en verano, en junio, que el central del Glorioso debutara con la amarilla de Malasia aludiendo que su bisabuelo había nacido en ese país. Como era consciente de que tendría poco recorrido con Argentina, decidió hacer las maletas. Debutó ante Vietnam pero hubo una denuncia y se desató la tormenta.

Sanción de un año para el zaguero argentino

La FIFA encontró irregularidades en la tramitación de la documentación y suspendió durante un año a siete jugadores de Malasia, entre ellos Garcés. Fue cuando inició la investigación, jugador por jugador, y en el caso del central albiazul, llegó a la conclusión de que el bisabuelo había nacido en Argentina, en la provincia de Santa Fe.

Pero el jugador tiene otra opinión y lo que tiene que hacer es demostrar que su antepasado vivió en Argentina pero venía, como emigrante, desde Malasia. Para ello se apoya en la Federación Malaya de Fútbol que también está intentando demostrar que existe esa partida de nacimiento. El caso de los otros seis es diferente.

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