El Zaragoza no aprovecha las superioridades numéricas
El equipo aragonés ha disputado esta temporada 180 minutos con al menos un jugador más y el balance es de un gol a favor y dos en contra.
El Real Zaragoza fue incapaz de ganar este fin de semana al Málaga a pesar de que el colista de la categoría jugó prácticamente todo el partido con un jugador menos por la expulsión de Javi Jiménez. Una especie de déjà vu, ya que esta misma temporada algo parecido le ocurrió contra el Eibar y el Alavés, habiendo disputado ya 180 minutos con al menos un futbolista más y con un balance de un gol a favor y dos en contra. Un dato que indica claramente que los aragoneses no han sabido aprovechar sus superioridades numéricas y que se ha traducido en dos empates y una derrota.
Frente al Eibar el marcador no se movió a pesar de que Venancio vio la roja directa en el minuto 40, pero es que además el conjunto vasco se quedó con nueve en el 77′ por la expulsión de Javi Muñoz. A pesar de ello, Yoel apenas tuvo trabajo. Contra el Alavés incluso fue peor, ya que Benavídez dejó a su equipo con diez en el minuto 37 y, a pesar de ello, los aragoneses ni siquiera fueron capaces de sumar un punto, ya que Jason marcó un golazo de falta en el 62′. Un tanto que significó el adiós de Juan Carlos Carcedo.
A diferencia de estos dos encuentros, Yáñez fue el incuestionable MVP en el partido de ayer. El guardameta evitó el gol del Zaragoza en varias ocasiones con intervenciones de mucho mérito y en una acción aislada Haitam puso por delante al Málaga. Giuliano rescató un punto en los instantes finales. Un empate injusto, ya que los aragoneses en esta ocasión sí que hicieron méritos para llevarse la victoria, pero la falta de acierto evitó de nuevo que el Zaragoza aprovechara una superioridad numérica.
Sin embargo, cuando ha estado en inferioridad sí que se ha notado en el marcador. El balance es de dos derrotas, con ningún tanto a favor y dos en contra en un total de 54 minutos jugados con un futbolista menos. Contra el Cartagena fue De Blasis quien aprovechó los nueve minutos que transcurrieron entre la expulsión de Jaume Grau y la de Musto, mientras que Pombo le dio la victoria al Racing en la segunda parte después de que Giuliano viera la segunda amarilla al filo del descanso.