El Málaga, en su momento más complicado
Con nueve puntos de 30 posibles el Málaga está en un momento delicado. Luismi admite que: “Con el nivel de los dos últimos dos partidos no nos da”.
El Málaga atraviesa por su momento más complicado de toda la temporada en plena recta final de la competición. Las dos últimas derrotas contra Cádiz y Albacete han dejado a la afición con la mosca detrás de la oreja por la sensación de que el equipo ha desconectado hasta el extremo de convertirse en un impoensable candidato para el sufrimiento.
En las diez jornadas que llevamos de segunda vuelta el Málaga ha sumado solo nueve puntos de 30 posibles. Dos victorias, tres empates y cinco derrotas, dos de ellas en La Rosaleda. Una situación difícil que convierte el encuentro del próximo sábado contra el Racing de Ferrol en lo más parecido a una final. Partido para el foco.
¿Cuándo empezó la mala onda?
El Málaga terminó la primera vuelta con 30 puntos tras una convincente victoria en El Molinón contra el Sporting. 1-3 con dos goles de Dioni y otro de Baturina. Décimo en la clasificación con nueve puntos más que el Eldense, primer puesto del descenso y solo cinco menos que el Oviedo, sexto en puesto de playoff.
La afición se empezó a ilusionar con algo más que la permanencia. Además, se abría el mercado de invierno, una ventana ideal para dar buscar dotar a la plantilla de un impulso, un salto de calidad. Se pensaba que con un par de delanteros el Málaga podría mejorar prestaciones. Ahí llegó la primera decepción y, podemos decir, punto de inflexión negativo. El Málaga fue el único equipo de Segunda que no se reforzó. Y casi con los mismos de Primera RFEF afrontó los albores de la segunda vuelta.
El camino está siendo complicado. Tras dar como bueno salvar un punto en casa ante el Deportivo con gol afortunado del canterano Chupete, llegaron tres derrotas seguidas ante Mirandés, Zaragoza y Racing más un empate contra el Levante. No se exteriorizaba la preocupación, aunque empezaba el run-rún: “Jugamos como nunca y perdemos como siempre”.
Los siguientes choques contra los desahuciados Cartagena y Tenerife se ganaron con mal fútbol y mucha fortuna. Gol de Baturina en la última jugada y otro de Dani Sánchez que pudo ser anulado por fuera de juego de Lobete. Y tras el engañoso empate en Almería igualando un 2-0 ante un rival que estaba a por uvas vinieron dos desastres ante el Cádiz y Albacete. Alarmas encendidas.
Nelson Monte da la cara
Tras concluir el penoso partido en el Carlos Belmonte Nelson Monte no tuvo reparos en admitir el mal juego del equipo “Hay que hacer autocrítica. No hemos estado bien. Hay que seguir trabajando y a pensar ya en el Ferrol, No hemos aprovechado la superioridad numérica. En nada nos hemos quedado con 10. Ellos han cerrado en la segunda parte con nueve dentro del área. No fuimos capaces de hacer un gol y toca mejorar”.
La realidad es que hay nerviosismo en la afición. “Les entiendo, pero quedan más de 30 puntos en disputa. Estamos a 11 puntos del objetivo. Confiamos en sacar esto adelante. Tenemos que hacernos fuertes en casa y confiar en la fuerza de La Rosaleda. Es normal el sentimiento de frustración de la gente. Antes de ser jugador, yo era aficionado de un equipo de Portugal. Cuando tu equipo no gana, pasa eso. Hay que ser autocríticos”.
El análisis de Luismi
Rescatamos también estas palabras de Luismi, el ‘obrero especializado’. “El vestuario está dolido. Era un partido importante ante rival directo. No te pueden meter dos goles en 20 minutos. Esta categoría es así y no hay margen de error”.
Sobre el exceso de juventud en la plantilla detalla: “Aquí es donde se hacen los jugadores. Aquí también se aprende. Son años de experiencia para la mochila. Si toca pelear por un objetivo se pelea. Hay que dar un paso adelante, pero creo que la gente está preparada. Con este nivel que estamos mostrando en estos últimos dos partidos no nos da. Hay que subir el nivel para conseguir los tres puntos en casa”.
Charla de Pellicer al final. “El vestuario estaba dolido. Sabíamos de la importancia de este partido. Esperamos que no tengamos que acordarnos de este partido más adelante. El míster nos ha dicho que hay que estar más unidos que nunca y que hay que salir más concentrados. El objetivo era hacernos fuertes en nuestro estadio y eso se tiene que notar. No se le puede pedir más a la afición. En el siguiente partido estarán ahí apoyándonos. Juntos vamos a conseguir este objetivo”.
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