El gran dilema de Xavi: Lamine o Raphinha
El técnico tendrá que tomar la decisión sobre quién ocupa el extremo derecho en El Sadar. Ahora mismo, el canterano parece ir por delante del resto.
Xavi Hernández tendrá que afrontar esta semana un dilema sólo al alcance de Hamlet. Y es que el regreso de Raphinha, tras cumplir los dos partidos de sanción, abren un debate sobre quién tendrá que ser el titular en la banda derecha el próximo domingo ante el Osasuna en El Sadar. En principio, el brasileño tendría que partir como principal candidato, al ser el extremo con más galones en la plantilla, sobre todo tras la marcha de Ousmane Dembélé. Sin embargo, la irrupción espectacular de Lamine Yamal, completando dos partidos espectaculares, obligará a los técnicos a hacer una profunda reflexión sobre si el canterano se merece o no seguir como titular.
Hay que recordar que si por algo se ha caracterizado Xavi es por no temblarle el pulso a la hora de darle galones a los jóvenes -con Gavi y Balde como máximos exponentes-, además de ser un defensor a ultranza de la meritocracia, es decir, apostar por quién esté mejor en cada momento. Bajo estos argumentos, parece muy difícil ahora mismo arrebatarle la titularidad a Lamine Yamal.
Tanto su rendimiento como sus números en este inicio de temporada son incontestables. Lamine no ha derribado la puerta, aprovechando la ausencia de Raphinha por sanción, sino que literalmente la ha hecho añicos, por lo que todo lo que no sea su continuidad en el once este fin de semana sería una sorpresa mayúscula ahora mismo.
En todo caso, será Xavi el encargado de gestionar esta maquiavélica situación, que además cuenta con otros invitados de piedra, como Ferran Torres, Ezra Abde y Ansu Fati. Y es que si Lamine está completando partidos estratosféricos, Ferran tampoco se está quedando precisamente corto, marcando en cada oportunidad que le dan y aprovechando con increíble profesionalidad y entereza todos los minutos. Por otro lado, el marroquí Abde también reclama su espacio en el equipo, mientras que Fati tampoco baja la guardia. Sin duda, una competencia que está sirviendo para que el equipo gane en intensidad y rendimiento en el bloque alto.