El Eibar navega a la deriva lejos de casa
Desde mediados de mayo, los armeros no saben lo que es ganar como visitantes en liga. Este curso, tan solo suman un punto de 18 posibles.
Los números como visitante del Eibar asustan al miedo. Cinco derrotas consecutivas, un punto de 18 posibles y siete goles en contra de diferencia. Solo el Sanse, que no ha sumado a domicilio todavía, puede empeorar estos registros en la división de plata. Por lo que no es de extrañar que su nociva tendencia lejos de Ipurua preocupe dentro de la entidad armera, que en caso de darse una victoria del Granada esta noche, podría terminar la jornada en puestos de descenso.
Para conocer la última victoria de los azulgranas fuera de su terreno, la vista tiene que llegar hasta el 12 de mayo de este mismo año, pues en la 39ª jornada del pasado ciclo, el Eibar sumó los tres puntos en Los Cármenes. El acierto de Corpas y Guruzeta en el área, con Antonio Puertas como gran surtidor, fue decisivo con tal de cerrar su último triunfo a domicilio. Pero, desde entonces, solo suma derrotas, exceptuando el primer punto del curso logrado en La Rosaleda, y ni el pase copero de la última semana a 100 kilómetros de casa ha hecho cambiar el rumbo.
Tras romper el maleficio frente al Náxara, el Eibar estaba decidido a hacer lo propio frente al Almería. Las seis bajas del primer equipo no invitaban a la euforia, pero San José, que cambió hasta 10 jugadores respecto a la primera eliminatoria del KO, confió en alargar las sensaciones hasta la competición que marca la regularidad. No obstante, todo se torció desde los primeros minutos. Corpas no acertó al defender su marcaje en los saques de esquina a Alex Muñoz y el cuadro indálico se adelantó hasta en dos ocasiones en el electrónico.
En ese instante, los armeros, que habían cuajado sus mejores minutos de la noche prácticamente justo después del primer tanto, acusaron el golpe en demasía. Y para cuando tenían que coger el camino de los vestuarios, los locales ya mandaban con tres tantos de ventaja. A diferencia de otros marcadores adversos, San José no quiso ajustar mucho en el descanso. Jugadores, esquema y plan parecidos con tal de remontar una distancia que a la postre sería inalcanzable, aunque un cabezazo de Arbilla hizo que el equipo eibartarra no se diera por vencido.
Noticias relacionadas
De hecho, no le perdió la cara en ningún momento al partido. Aunque en el fútbol las áreas mandan, y, tal y como reconoció su técnico, al equipo le faltó “contundencia” para volver a la senda del triunfo a domicilio. Cuando no lo hace en el calor de su hogar, los armeros siempre encuentran momentos de dominio hacia su rival, pero las acciones determinantes acaban saliéndole cruz. Con las buenas sensaciones en el juego no basta. Tampoco con generar ocasiones. El Eibar necesita ser más resolutivo cerca de la portería, porque, de lo contrario, el precipicio acecha. Y será una losa demasiado pesada para Ipurua, acostumbrada a ser su cemento.
¡Tus opiniones importan! Comenta en los artículos y suscríbete gratis a nuestra newsletter y a las alertas informativas en la App o el canal de WhatsApp. ¿Buscas licenciar contenido? Haz clic aquí
Rellene su nombre y apellidos para comentar