El Barça ilusiona
Los fichajes han subido el nivel del equipo y la idea de Xavi, dos jugadores por puesto, hace crecer la competencia. El objetivo del club es volver a la primera línea mundial desde ya.
El Barça salió reforzado del Allegiant Stadium de Las Vegas. Ilusionó a los incondicionales que estaban de veraneo por Nevada y a los culés que se levantaron de madrugada. El Clásico dejó dos conclusiones principales. La primera es que los refuerzos han venido para subir el nivel del equipo. Lewandowski dejó detalles de su condición de crack mundial. Pese a no estar aún fino, le ganó algún duelo a Alaba y estuvo cerca de marcar dos goles. Es un jugador con gran entendimiento del juego y va a adaptarse pronto a lo que pide Xavi. Raphinha es la sensación del momento. Su fútbol es atractivo. Suele ir a por faena cada vez que coge el balón. Encara, se asocia y busca paredes, centra y, además, tiene buen golpeo. Es el MVP de la pretemporada de momento, con dos goles y dos asistencias en dos partidos. También ha sorprendido Christensen, que venía entre incógnitas por un mal final de temporada con el Chelsea. Es cierto que vio una tarjeta por agarrar a Hazard, pero es rápido y se maneja muy bien con el balón. Da una salida aseada al equipo y sabe superar líneas con el pase. Kessié ha empezado por detrás de Gavi y Pedri, pero es un jugador con ambición y que empuja.
La segunda conclusión se puede sacar a través de las palabras de Xavi. “Aquí no valen nombres; esto va de rendimiento”. El técnico le pidió a Laporta y Alemany que le hicieran una plantilla con dos jugadores fuertes por puesto y lo está consiguiendo. En la delantera va a haber bocados en la derecha entre Raphinha y Dembélé; en la izquierda, entre Ansu y Ferran y arriba con Lewandowski y Aubameyang. Pero esa competencia se va a trasladar a la defensa (Christensen va a apretar de lo lindo a Piqué; y si llega Koundé el nivel subirá más aún), y al centro del campo, en el que Pedri, Gavi o Kessié se van a exigir desde el primer minuto.
El Barça aspira a no tener tantas desconexiones como la temporada pasada. Xavi quiere un equipo que presione arriba constantemente y mande en los partidos; que viva cerca del área rival para aprovechar la pólvora que tiene arriba. El Barça que la temporada pasada empezó con Yusuf Demir y Braithwaite en la delantera, tiene ahora de nuevo jugadores de fama mundial que lo pueden devolver a la primera línea en la que lleva varios años sin poder competir.