FRANCIA
Ramos tiene competencia
Con la vuelta de Kimpembe y el cambio de sistema del PSG, Galtier tendrá que decidir si juega el camero o el defensa francés.
Las bajas defensivas, que parecían un problema para el PSG, se han transformado en una oportunidad para que Galtier cambie de sistema en la capital francesa. El técnico francés había utilizado desde principios de temporada un 3-4-3 que, aunque no había tenido grandes descalabros, estaba sufriendo sus primeros contratiempos durante el último mes. De hecho, antes de la victoria ante el Marsella, el PSG venía de una racha de tres empates consecutivos que habían puesto en entredicho el sistema de tres centrales de los parisinos.
El domingo, en Le Classique y sin Ramos, Nuno Mendes o Kimpembe, Galtier decidió cambiar el 3-4-3 por un 4-3-1-2 que potenció, indudablemente al equipo. Según L’Équipe, la victoria por 1-0 ante el Marsella podría asentar definitivamente el sistema de cuatro defensas como el predilecto para el resto de la temporada. Una alternativa que, sin embargo, podría generar un dilema con Sergio Ramos.
El defensa andaluz, que cumplirá ciclo el viernes ante el Ajaccio (dos partidos de sanción por su roja ante el Reims), ha recuperado sensaciones esta temporada en París. Sus molestias en el sóleo han desaparecido completamente y el sistema de tres centrales de Galtier le había potenciado para, además de protegerle, no exigirle físicamente como si jugara a campo abierto con cuatro defensas. La vuelta de Kimpembe esta semana a los entrenamientos obliga al entrenador del PSG a decidir entre la experiencia del internacional español o la velocidad del central francés, teniendo en cuenta que Marquinhos es inamovible.
A priori, Ramos parte con ventaja. Su liderazgo en el vestuario, unido a su buen rendimiento, le han erigido como uno de los pilares de Galtier en este inicio de temporada. Aunque no pueda jugar el viernes ante el Ajaccio por sanción, la inactividad de Kimpembe, que debería, en principio, volver ante el Maccabi el próximo martes, no deberían, a corto plazo, amenazar su titularidad en París. Sin embargo, el sentimiento parisino de Kimpembe, formado en la cantera del PSG, además de ser uno de los favoritos del Parque de los Príncipes, podrían jugar a favor del campeón del mundo en 2018 con la selección francesa. Una competencia sana que deberá dar lugar a un aumento de nivel de ambos en la zaga defensiva.