Diez días frenéticos
El Barça tiene que sacar piezas de su puzzle con urgencia para que le encajen otras. La prioridad es Koundé y luego, los laterales. La salida de Aubameyang, clave
Aunque ha tenido un verano de locos, con fichajes que parecían imposibles y consiguió contra pronóstico, desde Lewandowski a Koundé pasando por Raphinha, al Barça le esperan todavía diez días frenéticos de cierre de mercado para tratar de encajar todas las piezas del puzzle y rematar la plantilla con la que Xavi soñaba en verano. Por llevar un orden, lo primero en el Barça es la inscripción de Jules Koundé, que no ha podido jugar ya los dos primeros partidos de Liga y espera estar disponible el domingo ante el Valladolid. Para ello, el club azulgrana debe liberar 20 millones de euros que deben salir de la venta de Aubameyang y la rescisión de Memphis Depay, que deberían acabar en el Chelsea y la Juventus respectivamente. En las conversaciones han aparecido dificultades, pero continúan. Ayer hubo un nuevo empujón en la negociación con el club londinense. El objetivo, evitar un show con el central francés, que tiene una cláusula para salir gratis si el Barça no consigue inscribirlo.
Las otras salidas que el Barça pretende acelerar son las de Sergiño Dest (que no quiere marcharse), Umtiti y Braithwaite. Esas ventas más marginales podrían abrir también masa salarial a los fichajes de los laterales. Los preferidos son Juan Foyth y Marcos Alonso, pero el Villarreal se muestra intransigente con el argentino; y la llegada del lateral del Chelsea se ha ido enfriando extrañamente, tal vez al ritmo que Alejandro Balde puede coger peso en el Barça. Después de Azpilicueta, Marcos sería el segundo ‘blue’ al que dejan en la estacada en Can Barça este verano… Héctor Bellerín y Javi Galán son las alternativas a Foyth y Marcos.
Dentro del Barça mantienen, además, que esto no es todo. Y airean que el fichaje de Bernardo Silva es posible por más que la puerta parezca cerrada incluso por el jugador, que ya fue titular contra el Newcastle, jugando a un gran nivel, y que aseguró estar centrado ya en hacer una gran temporada con el Manchester City después de admitir que su sueño tendrá que esperar. Bernardo llegó a Girona este lunes con los citizens y no hizo declaraciones. Guardiola, eso sí, había insistido horas antes: si un jugador no quiere estar en un club, siempre se puede llegar a un acuerdo. En todo caso, la llegada de Bernardo resulta algo quimérica, más con la situación salarial que tiene bloqueado a Koundé; y necesitaría, además, de la venta de Frenkie de Jong, que se mantuvo firme en los días de mayor presión en Estados Unidos y ahora hasta ha sido titular en el Reale Arena.