De los tres centrales y medio, al doble en un año

Con la llegada de Sergio Ramos, el Sevilla vira por completo la política de su planificación deportiva en el puesto central de la defensa con respecto a hace un año. Sólo así se explica que en la actualidad haya en el vestuario el doble de efectivos para cubrir la posición de central que al inicio de la pasada temporada cuando, para colmo, se había traspasado a los titulares Diego Carlos y Koundé.

Julen Lopetegui inició la temporada pasada con tres centrales y medio a sus órdenes. Marcao, Nianzou y Rekik, además de un Gudelj que comenzaba a reconvertirse y que ni por asomo tenía los conceptos de central que hoy tiene, aunque aún le siguen faltando. Tres centrales y medio mal contados para la disputa de tres competiciones. Y todos, salvo Gudelj, más que propensos a las lesiones.

Ahora, un año después, Mendilibar tiene hasta siete efectivos para el puesto. Sigue Gudelj, que ya es mucho más central que mediocentro defensivo. Siguen Marcao y Nianzou, que para no variar vuelven a estar lesionados. Se cuenta con Kike Salas, que tras debutar con Lopetegui y jugar cedido en el Tenerife, se quedó en la primera plantilla. Y se compró a Badé, Gattoni... y ahora a Sergio Ramos. De los tres y medio a los siete.