Joselu, una solución con asterisco
La pena máxima que el delantero transformó contra la Arandina apacigua el problema de los penaltis en el Real Madrid, pero no lo extingue.
El vacío goleador que dejó la marcha de Benzema pronto quedó olvidado por el impresionante rendimiento de Jude Bellingham (el inglés lleva 17 goles en 22 partidos, a un ritmo de una diana cada 112 minutos), pero el adiós del francés dejó otra asignatura pendiente que parecía irresoluble para el Madrid: los lanzamientos de penaltis. Joselu ha abordado parte de la solución tras la pena máxima que transformó en Aranda. Después de tres fallos en la temporada (y otro en la gira) a cargo de Rodrygo, el propio Joselu y Modric, el Madrid marcó a la Arandina su primer penalti del curso, pero el caso sigue abierto porque el 14 no es un habitual en las alineaciones…
El problema retumbó bien pronto, en la tercera jornada de Liga. Todavía con 0-0 en el marcador (el partido acabó 0-1 gracias a un gol de Bellingham), Rodrygo falló un penalti contra el Celta. Lo paró, con una gran estirada, Iván Villar. El error no hubiera tenido más trascendencia que la puntual por el momento en el que fue de partido, pero las declaraciones de Ancelotti alimentaron el debate. El técnico confesó que aquel penalti lo debía haber tirado Modric, y que así se lo transmitió a Valverde en el momento, pero el croata, que tiene ‘apadrinado’ al brasileño, se lo cedió al paulista. Casualmente, en la previa de ese mismo partido Carletto había reconocido que el propio Rodrygo, Vinicius –que ya había fallado un penalti en el Clásico de pretemporada– y Valverde estaban entrenando los penaltis para estar en la nómina de lanzadores junto a Modric, pero sin establecer una jerarquía.
Días más tarde, el técnico sí explicaba en Valdebebas su lista de lanzadores: “Depende del partido. Joselu los lanza muy bien, Modric también, Vinicius... ese sería el orden, con todos sanos”. Y se aplicó un mes más tarde cuando Cuadra Fernández señaló los once metros con el partido ante Osasuna con el encuentro ya sentenciado (4-0). Joselu estaba en el campo, lo tiró… y lo repelió Andrés Fernández. El debate, de nuevo latente.
Se reactivó en Berlín. Estaba Joselu en el campo, pero el turno fue para Modric. Y se estrelló contra Rönnow. “Buscar una razón es complicado. Luka suele ser frío y marcar. Lo estamos intentando con Bellingham, Rodrygo, Vinicius, Joselu... ¿Qué puedo decir?”, se lamentaba Ancelotti tras el partido que puso fin a la fase de grupo de la Champions.
La Copa, la competición de las oportunidades, le brindó una nueva a Joselu y esta vez no falló. Después del partido, el delantero se mostraba optimista. “En adelante, dependerá de quién esté en el campo. Tenemos en la plantilla muchos especialistas, jugadores con mucha calidad, hoy me ha tocado a mí. No es el problema, a partir de ahora entrarán todos”. Pero muy probablemente Ancelotti tendrá que seguir buscando lanzador, porque Joselu apenas juega el 51% de los minutos.
De la fiabilidad a la incertidumbre
Hasta hace no mucho, tener un penalti a favor era sinónimo de gol para el Madrid. Se sucedieron tres especialistas con un alto índice de acierto. Cristiano marcó el 85% de los que tiró (79 de 92); Ramos, el 95% (22 de 23); y Benzema, el 86% (32 de 37). Hasta tal punto que el Madrid llegó a encadenar 38 lanzamientos sin fallo desde los once metros. De los 37 siguientes, malogró 11. La temporada pasada ya asomaron los problemas que se avecinaban. El Madrid falló los dos últimos que no lanzó Karim (Asensio contra el Mallorca y Modric en la final del Mundial de Clubes).
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