Real Sociedad
Carlos Fernández aprieta para volver antes del Mundial
El delantero sevillano vuelve a ejercitarse con el grupo, y aunque el cuerpo técnico le protege y no quiere que tenga prisa, siente buenas sensaciones y espera que ésta sea el paso definitivo para volver a entrar en una convocatoria
La Real Sociedad espera con muchas ganas la vuelta de Carlos Fernández. Su regreso vendría como agua de mayo para un equipo txuri-urdin muy diezmado en la parcela ofensiva por culpa de las lesiones. El delantero sevillano ya está trabajando con el grupo, aunque todavía se considera prematuro pensar que puede estar en disposición de volver a jugar. Apenas ha hecho dos sesiones con todos sus compañeros desde que volviera a caer lesionado justo antes del comienzo de la temporada liguera. Así que hay que tener paciencia. Pero él aprieta, porque quiere reaparecer en partido oficial antes del siguiente paron en la competición, que coincide ya con el comienzo del Mundial de Qatar, allá por el mes de noviembre. El 9 de noviembre, con jornada entre semana, será el último partido que jugarán los donostiarras.
Después de ejercitarse el pasado sábado con el grupo, tal y como explicó Imanol Alguacil, para dar un paso más en su recuperación, Carlos Fernández ha vuelto a entrenar con todos sus compañeros en la primera sesión de la semana, tras los dos días de descanso que el técnico oriotarra dio a su plantilla después de la victoria contra el Espanyol. Es el primer entrenamiento de esta semana sin partido, por lo que su presencia con el grupo ha sido la mejor noticia del día, porque el atacante sevillano tiene por delante todo el parón liguero para ganar tiempo y regresar lo antes posible. Su deseo es estar listo para la vuelta a la competición el 2 de octubre en Girona, pero eso parece complicado. El sevillano se ha exprimido a tope en la parte de la sesión en la que ha podido participar, porque no ha terminado todo el trabajo con todos sus compañeros. Le ha falta el partidillo del final, pero el resto de ejercicios los ha hecho al mismo ritmo que los demás y sin resentirse de sus problemas musculares, algo que es muy positivo. De momento, no tiene el alta deportiva, porque se va con mucha cautela con su reaparición en la competición. No quieren dar pasos en falso y que vuelva a recaer, como le pasó en agosto, antes del inicio de LaLiga, por culpa otro problema muscular fruto de su larga inactividad por la grave lesión de rodilla que sufrió en verano del 2021. Esperan que éste sea el paso final para su definitiva reaparición, con la confianza en que pueda llegar antes del Mundial. Carlos Fernández trabaja con esa idea, y se exprime a tope para estar a suspicion de Imanol cuanto antes.
Por lo demás, los que siguen sin aparecer todavía son Robin Le Normand, al que todavía le queda para superar su lesión ósea por estrés y no parece que vaya a estar disponible para la vuelta del parón; Mikel Oyarzabal, que ya corre y toca balón de manera individual a buen ritmo a los seis meses de su grave lesión de rodilla; Ander Barrenetxea, que sigue sintiendo molestias por su operación en el muslo; y Umar Sadiq, que está al comienzo del proceso de recuperación de su rotura de ligamento cruzado. A ellos se ha unido Mohamed Ali Cho, que regresó lesionado de la concentración con la sub-21 y del que la Real ha confirmado su problema muscular. También faltaron los internacionales Alexander Sorloth, Take Kubo, Jon Pacheco y Beñat Turrientes. Quien sí estaba entrenando, y sobre el que se han puesto muchos focos, ha sido Martin Zubimendi, trabajando con normalidad, sonriente y cercano con los pocos aficionados que se han acercado a la sesión a puerta abierta en el campo Z7 de Zubieta, ajeno a los rumores que le vinculan con el Barcelona, mientras no firma su renovación con la Real Sociedad, después de acercar en verano las posturas para ampliar su contrato hasta 2025.