Javi Sánchez y Anuar, ausentes, y Rosa, alta en la vuelta al trabajo
El conjunto de Pezzolano trabajó a puerta abierta con cambio de hora incluido, a partir de ahora se entrenarán desde las 11:00 horas a puerta cerrada.
El Real Valladolid afronta una semana muy distinta a las anteriores ya que la victoria ante el Cartagena ha proporcionado oxigeno y margen para trabajar y preparar con más tranquilidad el choque del domingo (16:15 horas) ante el Oviedo.
La única sesión de la semana a puerta abierta y por tanto la única en la que se puede ver como está la plantilla, se llevó a cabo en la mañana del martes con cambio de hora incluido ya que a partir de ahora los jugadores están citados una hora más tarde que hasta ahora, es decir, a las 11:00 horas seguramente aprovechando la bajada de temperaturas a esas horas de la mañana, lo que permite aprovechar también antes de empezar sobre el césped para el trabajo de recuperación de lesiones o en el gimnasio. Las sesiones de miércoles, jueves, viernes y sábado serán a puerta cerrada.
El conjunto blanquivioleta ha tenido dos jornadas de descanso tras la victoria del pasado sábado y en cierta forma es algo de ventaja sobre su rival asturiano ya que el Oviedo jugó el partido de Liga en la noche del lunes y perdió ante el Andorra (1-0).
En la sesión estuvieron ausentes por lesión tanto Javi Sánchez como Anuar. El primero se supone que está en su última fase de recuperación tras caer lesionado en el último partido de la liga pasada y el segundo, tras entrar en las convocatorias en jornadas precedentes, se cayó de la lista ante el Cartagena y de momento está fuera de los entrenamientos.
El Real Valladolid afronta un calendario que se ve sobrecargado por la jornada entresemana del día 4 de octubre, miércoles a las 19:00 horas, día en el que tendrá que visitar al Eldense, debutante en la categoría pero que ya ha demostrado su peligro y sino que se lo pregunten al Espanyol esta misma semana.
La buena noticia de la sesión la dejó Lucas Rosa que tras perderse el choque ante el ‘Efese’ por un proceso vírico, se unió al resto del equipo y trabajó con normalidad.