Así inscribió el Barça a Koundé
El club aumentó su límite salarial ingresando 5,5 millones de euros en una cuenta de LaLiga y mediante dos pagarés de 2.750.000 euros que vencen el cinco de julio del próximo año.
El presidente del FC Barcelona, Joan Laporta, decidió la semana pasada coger el toro por los cuernos y solventar el caso Koundé con una actuación poco habitual pero normativa que apela al artículo 92 previsto en las Normas de Elaboración de Presupuestos de Clubes y SADs, conocidas en el ámbito del fútbol como “Las Normas”.
“Las Normas” son a los clubes de fútbol como una inspección de Hacienda para un autónomo, esa regla que no puede eludirse, pero en este caso el Barcelona encontró una grieta para evitar que el caso de Koundé se enquistara. El jugador francés llevaba dos jornadas sin poder ser inscrito y su intranquilidad iba en aumento al unísono de la del técnico Xavi Hernández.
Fue entonces cuando el presidente del Barcelona decidió tirar por el camino del medio y acogerse al artículo 92 de las famosas “Normas” mediante el cual un club puede aumentar su límite salarial mediante un aval que incremente la capacidad de inscripción anticipando la consecución de ingresos o beneficios o en previsión de la reducción de gasto. Es una medida que tiene un carácter estrictamente transitorio, con el compromiso por parte del club de restablecer la situación previa durante la misma temporada.
La masa salarial del Barcelona en el momento que se trataba de inscribir a Koundé estaba fijada en 656.429 millones de euros, de los cuales 548.118 millones correspondía a la plantilla deportiva inscribible. Esos eran los topes y el Barcelona tenía una plantilla inscrita que sumaba 546.242 millones de euros. No había margen para inscribir a Koundé.
Fue entonces cuando se optó por tirar del citado artículo 92, que obliga a prestar unas garantías a través de un depósito en efectivo o aval bancario, que debe ser aportado por el accionista o un tercero ajeno al club, pero nunca por el propio club.
El viernes pasado, el presidente Joan Laporta y el tesorero Ferran Olivé presentaron ante LaLiga sendos pagarés por valor de 2.750.000 euros al tiempo que se ingresaba en efectivo en la cuenta de LaLiga destinada a Depósitos y Consignaciones la cantidad de 5.500.000 euros. LaLiga impide específicamente que una misma persona firme dos pagarés. En total, 11 millones que permitiron ampliar el límite salarial y fichar a Koundé.
Este dinero queda en custodia de LaLiga hasta el 5 de julio del año que viene como máximo. Si en esa fecha no se han cumplido los objetivos de reducción de gasto o aumento de ingreso, la cantidad repercutiría contra los avalistas y quedaría registrada en el balance del Club como patrimonio neto con carácter no reintegrable, pudiendo LaLiga aplicar estas garantías para el pago de deudas vencidas por el club.
No obstante, si estos objetivos marcados se alcanzaran antes del fin del plazo (con una venta antes de acabe el mercado actual, por ejemplo) las cantidades avaladas se restituirían a los avaladores.