Arrasate: “Estamos ayudándonos los unos a los otros para salir de esta situación”
El técnico bermellón analiza en IB3 la situación de su equipo tras un inicio de campeonato inesperado.
En una amplia entrevista concedida al ente autonómico, IB3, Jagoba Arrasate repasa la situación de ‘su’ Mallorca, muy distinta a la de su estreno la pasada temporada.
Con el equipo colista tras ocho jornadas, el entrenador vasco afirma que ve salida y asegura sentirse respaldado.
Hace unos años, una crisis parecida en Osasuna tuvo como protagonista a Braulio, entonces director deportivo de los navarros, que salió en su defensa públicamente. Arrasate recuerda aquella historia: “aquello fue único y siempre voy a estar agradecido a Braulio porque además lo hizo desde el corazón y habiendo hablado de ello con el presidente, fue algo muy potente, salió bien y hay mucha gente que lo utiliza como ejemplo aunque después no predique con el mismo, pero yo ahora mismo siento a Pablo Ortells muy cerca, a Aritz Aduriz muy cerca, y estamos ayudándonos los unos a los otros para salir de esta situación, aunque entiendo a la afición o a la prensa que echan de menos que alguien salga, pero yo, de verdad, no siento que necesite eso para sentirme arropado”.
En lo que sí difiere Arrasate con el modelo actual del fútbol es en que los entrenadores se hayan convertido en portavoces de la entidad:
“Es algo que tenemos que asumir porque somos los únicos que hablamos, y para mí que hablamos demasiado, hablamos antes, después y en el campo en diferentes medios, y los que juegan en Europa hablan el doble y actualmente quien quiera saber algo del club le pregunta al entrenador y, a veces, este no es el más indicado para hablar de según qué cosas, a veces tampoco va de la mano del club y ahora mismo nuestra figura está un poco sobreexpuesta”.
En este sentido, ¿Qué es lo que peor lleva?:
“Me fastidia, sobre todo, que es difícil que nos mostremos como somos, tu antes del partido en una rueda de prensa quieres responder sin meter la pata, quieres lanzar un mensaje, pero estás muy metido en el partido, y después del mismo estás arriba o abajo en función del resultado y rara vez te pueden conocer tal como eres de forma natural, y eso me fastidia y lo que menos me gusta el algo como lo del otro día, que saquen una imagen tuya y que la gente saque conclusiones erróneas de mi imagen cuando la verdad es que estaba en modo reflexivo sobre lo que había hablado al descanso del partido”.
Preguntado por la soledad del entrenador en las derrotas, Arrasate asume que “a veces nosotros mismos nos buscamos esa soledad porque cuando perdemos no queremos estar con nadir, queremos estar solos para pasar el mal trago”.
Sobre los líderes del vestuario en momentos como este...
“A veces se puede tener una idea desde fuera, pero luego en el vestuario, cuando hablamos, cuando entrenamos aparecen los líderes silenciosos, porque el liderazgo se manifiesta de muchas maneras, pero claro que hay líderes”.
Preguntado si es feliz, Arrasate afirma que “es complicado tener una sonrisa y ser feliz cuando el equipo va último, tienes sensación de responsabilidad, de querer trabajar más, de querer poner el foco en más cosas”.
Aún así, ve brotes verdes: “veo una luz, y es que quedan 30 partidos, y el equipo me invita al optimismo desde el día a día, desde los entrenamientos, el momento es complicado, pero creo que todavía estamos a tiempo”.
Y la manera de salir, está muy clara, según el entrenador bermellón: “aceptando la realidad, que vamos últimos, y que tengo parte de culpa y también soy quien tiene que buscarla solución, y en esas estamos”.
Y para conseguir ese primer objetivo, Arrasate asegura que “el grupo está responsabilizado, entrenando bien, con ganas de revertir la situación”.
Una de las claves de la diferencia que observa entre el vestuario del Mallorca y su exequipo Osasuna, está en la cantera: “todos los vestuarios son diferentes y en el caso de Osasuna, cuando hay mucha gente de la casa, mucho canterano, al final es distinto y puede ser más fácil para el entrenador, y a veces salen cosas inesperadas que las tienes que afrontar”.
El próximo partido será en Sevilla, pero Arrasate ha puesto el punto de mira clave en los compromisos de casa ante Levante, Getafe, Osasuna y Girona: “somos conscientes de que vienen una serie de partidos en los que es importante sumar y normalmente los objetivos tienes que sujetarlos o sostenerlos en casa”.
Finalmente, no podía faltar una referencia al caso Dani Rodríguez:
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“Yo veía a Dani muy implicado, muy cerca de los jóvenes en pretemporada, con la llegada de Pablo Torre(competencia en el campo), sabiendo que es su último año de contrato y entrenando muy bien, los dos primeros partidos había participado desde el banquillo y para mí fue muy inesperado que saliera aquello. Yo, cada vez que le veo sé que él está para entrenar y fastidiado porque no puede aportar y veo a ese Dani que nos ayudó el año pasado y se me hace un nudo en el estómago, somos personas y tenemos emociones, cosas normales, y no puedo decir que no va a volver a jugar conmigo, no sé lo que puede pasar, pero también quiero ejercer bien mi profesión, está entrenando muy bien, le estamos dando un espacio y lo está aprovechando para ponerse bien y aportar a los compañeros, y en eso siempre ha sido un profesional, siempre ha sido el primero en llegar y en ese aspecto no tengo queja de él”.
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