Aquí se divierte el que gana... aunque no mucho
El Real Valladolid ganó 0-1 en Elda y para la historia quedará que los de Pezzolano sumaron su cuarta victoria consecutiva que le coloca en la zona de privilegio. Esos son datos. Después está el asunto subjetivo, el valorar el juego del equipo y ahí entramos en la casa del terror. Porque el encuentro de los blanquivioletas fue un monumento al miedo después de adelantarse, acomplejado y aculado por un equipo recién descendido que no tiró a puerta, y eso puede ser una virtud pucelana, pero al que apenas conseguió inquietar en la segunda parte. Por si fuera poco, los vallisoletanos acabaron el encuentro jugando con seis defensas, tres centrales y el lateral derecho reforzado, y dos cabeceros de área: Juric y Malsa... por un segundo dudé si los blanquivioletas jugaban ante el modesto Eldense o frente el Bayern de Munich...
Los prácticos me dirán que lo importante era sacar el partido y que los pucelanos se vuelven, mañana después de entrenarse en el Rico Pérez de Alicante, con un triunfo que le coloca en la parte de arriba. Y tendrán razón, pero al segundo presupuesto de la Liga, a un recién descendido, a un aspirante a volver a Primera, hay que pedirle más fútbol. Y sí. Me acuerdo de los desastres de Llagostera, Miranda, Amorebieta... no se me olvida, pero creo, sinceramente, que el Pucela puede dar más y tiene que dar más para aspirar a lo que pretende.
Sylla metió la que tuvo, eso es lo que tienen los equipos que quieren subir, que muchas veces ganan por inercia. El Pucela ahora está en una ola muy positiva, ganando encuentros desde la fortaleza defensiva. Y es que los blanquivioletas sumaron su cuarto partido seguido no sólo ganando, sino dejando la portería a cero pese a que el meta brasileño John sigue sin ofrecer garantías y seguridad, pero lo cierto es que son cuatro partidos ganados, sin recibir un gol, 12 de 12 puntos.
Y hubo nombres propios en el equipo de Pezzolano. El Pucela pierde a Moro seguramente por un mes, Malsa volvió a jugar de blanquivioleta, por delante de César de la Hoz, y Kenedy no repitió su gran encuentro del domingo y en su lugar soltó una variedad de jugadas sin peligro, perdió muchos balones y pecó de egoísmo. El brasileño tiene que jugar para el equipo y, a partir de ahí, lucirá... De lo contrario se equivocará. Volvió a jugar Gustavo Henrique junto a un buen Boyomo y Monchu se erige en el nuevo líder del equipo por acción, gran pase a Sylla para marcar, y por liderazgo...
El Real Valladolid ahora, sin jugar bien, va, está en una buena ola y recibirá al Mirandés el domingo para proteger su puesto en la zona de privilegio, para buscar su quinto triunfo consecutivo que le otorgue la confianza suficiente para ir a visitar al Espanyol. Allí no será posible ganar haciendo un partido como el de Elda... pero eso será otro cantar. Mientras tanto, nos acordaremos de aquella frase de Vicente Cantatore: “Aquí se divierte el que gana”... aunque, yo añadiría, que con partidos como el de hoy no mucho...