Aprobados y suspensos del Racing contra el Tenerife: solo sobresalieron las ganas
El equipo de José Alberto empezó fatal, pero marcó un golazo Íñigo Vicente, cuando mejor estaba el empató, con otro buen gol, Romero
1. Miquel Parera: Hizo una estirada soberbia en el primer tiempo y siempre trasmitió seguridad. En el gol le sorprendió que el tiro de Romero pasara entre las piernas de Germán.
23. Dani Fernández: Sufrió en defensa y apenas tuvo participación en ataque. No quemó la traca, pero ha tenido mejores días.
16. Germán Sánchez: Menos mal que el regalo que le hizo a Garcés no acabó en gol, como el pasó en Vitoria. Le hubiera dejado marcado. Aparte, estuvo convincente en el juego aéreo ante un cliente muy duro como Enric Gallego.
15. Rubén Alves: Acabó lesionado, pero hizo un partido tan solvente como acostumbra. Anularon un gol a Gallego por apoyarse con los dos brazos sobre sus hombros.
3. Eneko Satrústegui: Cumplió perfectamente en defensa. Hizo un par de internadas con intención en ataque a las que les faltó precisión.
6. Íñigo Sainz-Maza: Una tarjeta a los cinco minutos condicionó su juego, de continuas disputas. Eran tres contra dos en el medio y no lograron sacar partido de ello.
21. Aritz Aldasoro: Como Íñigo, pero medio punto mejor. Son bastante parecidos, más de conducir que de ordenar el juego y eso, tal vez, hace que al fútbol del equipo le falte orden.
7. Jordi Mboula: Gris. No fue el puñal de otras tardes. Participó poco y sin éxito.
24. Jorge Pombo: Hubiera venido muy bien el Pombo de Mendizorroza, mucho más chisposo en los controles, a la hora de darse la vuelta, a la hora de conducir las contras..., la pidió siempre, eso sí.
10. Íñigo Vicente: El mejor. Su gol, robando primero un pase horizontal entre centrales y resolviendo con el exterior, sorprendiendo al portero, junto al poste, fue de bandera. Los mejores detalles de la noche fueron suyos.
19. Matheus Aias: Es difícil pone un pero a un tipo que se pega la paliza que se pegó el delantero paulista, pero si solo juegas con un punta, necesitas que meta más miedo al portero rival.
Salieron desde el banquillo
25. Marco Sangalli (62′): La media hora larga que jugó no le dio para dejar nada para el recuerdo. Ni bueno, ni malo. Esta vez jugó por la derecha, su posición natural.
20. Juergen Elitim (74′): El partido estaba muy loco para esas alturas, pero siempre da la sensación de poner algo de cordura en las circulaciones. Es complementario a los demás centrocampistas.
80. Pol Moreno (80′): Entró, con un calentamiento acelerado, por la lesión de Rubén Alves. Jugó en el perfil izquierdo, que él también domina. Nada que objetar.
