Aprobados y suspensos del Barcelona: Raphinha, Balón de Oro

Peña: El guardameta se ha ganado una plaza para el Bernabéu. Gran partido del alicantino, que sigue en estado de gracia. No tiene la calidad con los pies de Ter Stegen, pero no se esconde a la hora de buscar el hombre desmarcado y dar salida al balón.

Koundé: Sigue ofreciendo su mejor versión partido tras partido. Ahora mismo es el mejor lateral derecho del mundo. Con la ironía añadida que él quería ser central, pero los hechos han acabado dando la razón a sus entrenadores. Supo frenar a bólidos como Davies y Coman.

Cubarsí: Que un chaval de 17 años juegue con esta seguridad y solvencia partidos de alto voltaje tiene un punto de paranormal. Decía Kompany que estamos ante un central que podría marcar una época. Pues no ha querido esperar ni un día en darle la razón.

Íñigo: El central vasco es el gran líder en defensa. Su compromiso, esfuerzo, trabajo y contundencia son claves para que el Barcelona sea un muro. Y lo hace además asumiendo mil y un riesgos, con la defensa adelantada en el mediocampo.

Balde: A veces le falta un poco de criterio y precisión en sus jugadas, pero eso no le impide ser un lateral de primer nivel, que deja huella en su banda. Tuvo problemas con Olise y luego con Sané, pero al final acabó ganando sus duelos.

Casadó: Kimmich haría bien en renovar con el Bayern porque ahora mismo el pivote defensivo está bien defendido por La Masia. Y es que cuando regrese Bernal seguramente tendremos a los dos mejores pivotes españoles, con permiso de Rodri. Ver jugar a Marc ante el Bayern ha sido un regalo para todos los sentidos. Su ausencia en el cuarto gol es para ver una y mil veces. Un jugador que ahora mismo está seguro en la lista de De la Fuente.

Pedri: Tras unos primeros minutos un tanto desdibujado, el canario volvió a sacar el manual estilo para dar una auténtica lección de fútbol. Genial, brillante, referente y protagonista, todo lo hizo bien. Tiene tanto talento que a veces parece que juegue caminando.

Fermín: Excelso. Su aportación fue simple y literalmente sublime. No sólo le puso testiculina a todas sus acciones, sino que además le regaló el gol a Lewandowski, tras ser el más listo de la clase en una salida en falso de Neuer.

Lamine Yamal: Se dice y no pasa nada. Lamine está llamado a ser el relevo de Messi para las próximas dos décadas. Tarde o temprano el 10 será de su propiedad. La exhibición de regates, caños y engaños fue de las que difícilmente se olvidarán en años. Davies parecía un escolar intentando ver la pelota dónde iba. Su asistencia en el tercer gol a Raphinha es sólo para jugadores escogidos.

Lewandowski: El polaco demostró que los viejos rockeros nunca mueren. Se marchó con otro gol en el zurrón, sumando ya 15 en 13 partidos. Pero su trabajo a espaldas de portería fue descomunal. Fue siempre una bomba de oxígeno para sus compañeros.

Raphinha: En serio, que le den el Balón de Oro. Hacía años que no se veía una exhibición de eficacia y talento en Barcelona. Ahora mismo hablar que costó 58 millones, parece un regalo. Marcó tres goles espectaculares, uno dejando sentado a Neuer, otro haciendo un caño al rival y el último tras una demostración de potencia apoteósico. Acabó manteado por sus compañeros y ovacionado en las gradas. Es ahora mismo el jugador más completo del mundo.

CAMBIOS

Frenkie: Poco a poco el holandés va recuperando sensaciones. Mejoró en prestaciones respecto a los dos últimos partidos.

Olmo: Muchos esperaban su titularidad ante el Bayern. En todo caso, en 15 minutos sirvió dos asistencias que estuvieron cerca de aprovechar Lewandowski y Yamal.

Pau: Buenos minutos del delantero.

Gavi: Jugó cinco minutos. Suficientes para demostrar que sigue dándolo todo en el campo.

Fati: Minutos testimoniales, pero llenos de pundonor.