Ediciones
Resultados
Síguenos en
Hola

REAL MADRID

El mercado ofrece más gangas

La llegada de Rüdiger reafirma una nueva estrategia en la política de fichajes del Madrid: incorporaciones a coste cero o a punto de finalizar contrato.

Antonio Rüdiger, nuevo jugador del Real Madrid, en un partido con el Chelsea.
Antonio Rüdiger, nuevo jugador del Real Madrid, en un partido con el Chelsea.NurPhotoNurPhoto via Getty Images

La inflación en el mercado de fichajes obliga a reinventarse al Real Madrid. La irrupción de los clubes-Estado y la pujanza de la Premier League han encarecido hasta convertir a las estrellas en jugadores prohibitivos: traspasos disparados, defensas que cotizan a 80 millones de euros como si de una tarifa plana se tratase... Prácticas que limitan el acceso a clubes como el Madrid, atractivos deportivamente, poderosos y saneados, pero que no poseen el recurso a un fondo soberano ilimitado. El club blanco, otrora gran dominador del mercado, solo tiene ahora un fichaje entre los diez más caros de la historia (el de Hazard, que ocupa el noveno lugar). En ese entorno se mueve la política de captación que manejan en Valdebebas, donde en los últimos años han virado en una estrategia a la caza de la de la búsqueda de oportunidades que ofrece el mercado. La incorporación de Rüdiger es el último éxito de esa política.

La estrategia pasa por un buen conocimiento del mercado para tener capacidad de anticipación y fijar objetivos entre los jugadores que finalicen contrato (para incorporarlos con la carta de libertad) o estén próximos a ello (para aprovechar esa situación y pagar un traspaso menor). Antes de Rüdiger, la temporada pasada Alaba también llegó libre. Dos defensas contrastados y campeones del Europa a coste cero.

Desde el Chelsea, como Rüdiger, también llegaron dos jugadores próximos a terminar su contrato. Courtois llegó en el verano de 2018 por 35 millones de euros (ese mismo verano, su sustituto, Kepa, les costó a los blues 80 millones y Alisson, 62,5 millones al Liverpool) y unos meses más tarde lo hizo Hazard por 100 millones más variables. Ese precio demuestra cómo el Madrid consigue regatear la inflación. El belga fue el primer galáctico que la llegada de Bale en 2013. Seis años antes, el galés costó prácticamente lo mismo: 101 millones de euros. El Madrid pudo comprobar en 2014 los réditos que pueden dar estas situaciones. Entonces se gastó 25 millones de euros en fichar a un Toni Kroos al que le quedaba un año de contrato con el Bayern. Lo que ha hecho el alemán con la camiseta blanca ya es historia...

Incluso con Mbappé el Madrid activó ambos planes: negociar con el PSG primero la temporada pasada cuando a Kylian aún le quedaba un año de contrato y, después, ir a por el jugador cuando se encaminaba al fin del vínculo. El poder de los petrodólares dio al traste con ambos intentos.

¿Qué oportunidades puede encontrar el Real Madrid en el mercado?

El Madrid puede encontrar muchos futbolistas de ocasión. Esta temporada terminan contrato jugadores como Pogba, un jugador que en su momento fue objeto de deseo del Madrid, pero cuya posición en estos momentos está cubierta y, además, la búsqueda para reforzar esa parcela se centra ahora en Tchouaméni. Dybala, otra pieza codiciada en su momento por los blancos, también queda libre. En la lista aparecen jugadores con menos cartel como Kessié, Belotti (el delantero del Torino pugnó hace cinco años con Dzeko y Mertens por el titulo de capocannoniere de la Serie A), Lacazette, Lingard o Romagnoli.

En el horizonte de 2023 también aparecen más estrellas. El Madrid ya orbita sobre uno de ellos: Gnabry. El alemán del Bayern se desenvuelve por la posición más 'inestable' del campeón de Europa: el extremo derecho. No es el único caramelo que el club blanco puede encontrar en esa posición. Tanto Salah como Sadio Mané, acaban contrato con el Liverpool dentro de doce meses. La lista de jugadores apetecibles es larga. El City deberá estar pendiente de no malvender o dejar marchar a Sterling, Gabriel Jesus o Mahrez (Manchester City). Fabián, que siempre ha gustado en el Madrid y a Ancelotti (quien le dirigió en San Paolo), también finalizará su vínculo con el Nápoles en la plenitud de su carrera (tendrá 27 años).