Despedidas en el Alavés: adiós a Velázquez y Joselu

Tras la conclusión de la temporada 2021-22, el Deportivo Alavés y Julio Velázquez separan sus caminos. Velázquez (Salamanca, 05/10/1981) llegó a Vitoria-Gasteiz cuando restaban ocho partidos para terminar el curso y su balance ha sido de tres victorias (todas ellas como local) y cinco derrotas, con las que el equipo no ha podido lograr el objetivo de la permanencia. El club no da por mala su aportación pero prefieren hacer una revolución total.

Una vez consumado el descenso a Segunda División, el técnico cierra su ciclo en Mendizorroza. "Desde el Deportivo Alavés agradecemos el compromiso, el trabajo y la profesionalidad de Velázquez y le deseamos los mayores éxitos en el futuro", reza la nota oficial. Era un secreto a voces que el charro no iba a seguir al frente del banquillo y que se estaba sondeando el mercado con dos grandes candidatos: García Plaza y Bolo.

Habrá una reconstrucción total de arriba hacia abajo. Sergio Fernández, el Director Deportivo, sigue contando con la confianza de Josean Querejeta, el propietario, y se está encargando de configurar la plantilla para la Liga Smartbank. Hace tres semanas estuvo en Argentina sondeando candidatos para desembarcar en Vitoria. Hay quince jugadores que terminan contrato y que, en su gran mayoría, saldrán de la estructura. Habrá que ver qué pasa también con los cedidos.

Joselu se despide de la afición

Joselu Mato ha hecho historia en el Glorioso porque es el máximo goleador del club en Primera a lo largo de su historia. Esta temporada que finaliza ha terminado con 14 goles aunque también es cierto que era el encargado de lanzar los penaltis. El gallego no aceptó una oferta de renovación del club y era un secreto a voces que no seguiría en Vitoria, máxime tras el descenso de categoría.

El de Silleda ha utilizado las redes sociales para despedirse de la afición. "Alavesistas y vitorianos, gracias por estos tres años. Gracias por la oportunidad de defender el escudo del Deportivo Alavés en cada partido, gracias también a todos mis entrenadores por la confianza, a los trabajadores del club y a mis compañeros. Soy un afortunado por haber jugado frente a una gran afición, haber paseado casi a diario por las calles de Vitoria recibiendo vuestro cariño y apoyo", reza el comunicado en el que no nombra a la propiedad, el Consejo de Administración o al Director Deportivo a la hora de agradecer cosas.

La nota es más amplia: "Haber jugado más de cien partidos para el Alavés y formar parte de su historia como máximo goleador en la Primera División (36 goles) me hace muy feliz. Una ciudad que merece un equipo en Primera División y que estoy seguro que pronto será así. Quiero pedir perdón por haber sido partícipe del descenso, nunca habría querido terminar mi contrato y despedirme así. Gracias y la mejor de las suertes. Siempre babazorro", concluye.