FINAL DE COPA DEL REY | BETIS - VALENCIA
Gayà: "Disfrutemos de esta final, nunca sabes cuándo volverás"
José Gayà (Pedreguer, 1995) atiende a AS a las puertas de su segunda final de Copa, la primera como capitán del Valencia. Piensa solo en el partido, hoy no hay más allá.
José Gayà (Pedreguer, 1995) afronta este sábado su segunda final de Copa, la primera como capitán del Valencia. El último valenciano que levantó un título con el brazalete fue David Albelda (Supercopa de Europa 2004), aunque Gayà ni piensa en ese momento ni menos aún en su futuro. Solo lo hace en cómo se desarrollará el partido y en cómo ganarle al Betis.
¿La final es un choque de estilos?
Puede verse así, porque al Betis le gusta tener mucho el balón y nosotros lo necesitamos menos para generar peligro. Pero cuidado, que al Betis también le gusta jugar en largo. Con Borja (Iglesias) y William (Jose) buscan bastante la espalda Ya en el partido que jugamos allí de Liga Bravo siempre jugaba en largo y los goles de hecho llegaron a la espalda. Es verdad que luego, en la segunda jugada, es cuando tratan más de asociarse y ahí tienen calidad. Pero el Betis de este año no es un equipo que sale siempre desde atrás, juegan más de lo que parece en largo. Veremos qué partido nos vamos a encontrar.
El guión del Valencia parece estar más escrito y basado en la intensidad.
La intensidad es algo que hoy en el fútbol no se negocia. Nosotros tenemos que encontrar el equilibrio que en algunos partidos nos ha faltado. Debemos ser intensos atrás, pero sin olvidarnos de atacar, porque si no será muy difícil el partido. Tenemos que amenazar al Betis.
¿Ve algún favorito?
Es una final. Ahí las fuerzas y los factores se igualan. Por la temporada que está haciendo, entiendo sinceramente que el Betis parte como favorito. Pero la historia dice que el Valencia tiene más experiencia en títulos, que hace tres años ganamos la Copa, y vamos a intentar que eso pese también.
¿Qué recuerdo le queda de esa Copa que ganaron en 2019?
El que más me llamó la atención fue salir a calentar y ver toda la grada de la parte del Valencia llena y la del Barcelona, vacía. Ahí tuve la sensación de que la ganábamos.
Pero esta vez la afición que está menos acostumbrada a ganar es la del Betis…
Sí, lo sé. Ellos hacen mucho tiempo que no ganan un título. Doy por segura su ilusión. Pero en el Valencia nunca sabes cuándo vas a volver a jugar una final, por eso la vamos a vivir igual.
¿Qué supone para usted afrontarla como capitán?
Entiendo que el brazalete te da una mayor responsabilidad, pero sinceramente no me la pongo. O no en un modo negativo. Asumo la responsabilidad, claro, pero no como presión. Voy a disfrutar la final, como hice en 2019. Son momentos que uno no sabe si volverá a vivir, por eso hay que disfrutar las finales como si fuera la primera y la última.
¿Pero de verdad se llega a disfrutar?
Sí, muchísimo. Y dentro del campo mucho más. En el césped uno se olvida de todo, se centra en el partido, en lo que tiene que hacer, la presión pasa a un segundo plano y te diviertes haciendo lo que más te gusta, que es jugar al fútbol.
En términos generales, un aficionado no afronta igual un partido cualquiera de Liga que una final. Cambia sus rutinas, sus nervios, sus preparativos… ¿en qué cambia un futbolista?
Te diría en la forma de tener que estimularte. Somos profesionales y tratas de encarar todos los partidos igual, pero evidentemente no es lo mismo. En otro tipo de partidos tienen que saber estipularte por ti mismo, en una final no, el sábado ya te digo que no nos hará falta. Al contrario. Lo que en una final tienes que hacer es saber calmarte, salir relajado, porque si vas con todo… te puede pasar factura en lo físico y mental.
¿Ha pensado en que sería usted quién levantara la Copa?
De momento no.
¿Por superstición?
No me gusta pensar en momentos que igual no llegan. Una cosa es que esté convencido de que va a llegar, que lo estoy, pero visualizo más momentos que puedan darse en el partido. Lo otro lo disfrutaré cuando llegue.
Solo ustedes, y más un jugador implicado como es su caso, saben lo que han pasado estos dos últimos años, ¿qué supone para el vestuario esta final?
Mucho. Supone muchísimo poder volver a jugar una final. Pero mucho, de verdad. Es algo que hace que valga la pena. Después de unos años malos, que han sido solo dos, pero parece que hayan sido diez o más, tenemos la oportunidad de conseguir otro título y sería algo histórico, porque creo nunca el Valencia ganó la Copa de manera tan seguida.
La Copa ha sido un oasis…
Ha sido un año raro, la verdad. Empezamos como un tiro, luego bajamos, en Navidad pudimos ponernos cuartos, luego en enero caíamos… nos ha faltado ser más regulares.
Se habló mucho de su imagen cabizbajo en el banquillo tras la derrota en Mestalla contra el Barcelona, ahora que le tengo delante, ¿en qué estaba pensando?
En nada de lo que dijo la gente o lo que imaginó la gente sobre el futuro. Era un gesto de rabia, porque sabía que tenía molestias y la semifinal contra el Athletic estaba muy cerca. No fue nada raro en relación a lo que especuló la gente.
¿El resultado de esta final puede tener influencia en su decisión de renovar o no?
No estoy pensando en mi futuro, la verdad. Estoy pensando solo en la final. Lo único que me interesa ahora es el partido del sábado, al que llego bien, con varias semanas entrenando y con ritmo de competición. Luego ya veremos.
¿Alguna promesa si ganan?
Sí, tenemos una, pero primero hay que ganar.