Un pulso crucial por Europa
Un Betis fatigado recibe a un Athletic que pierde a Íñigo Martínez pero sueña con las alturas. Heliópolis pide más al ambicioso proyecto de Pellegrini.
Betis y Athletic quieren vestirse de aspirantes para que Europa sea una realidad la próxima temporada. Sus destinos se cruzan en Heliópolis bajo sendas distantes (sigue el partido en directo en AS.com). El equipo de Pellegrini se bajó de la zona Champions y ahora mira de reojo a la Real Sociedad, al Villarreal e incluso a un Athletic situado a seis puntos y con ansias de agarrarse a su meta continental. No habrá medias tintas. A ambos sólo les sirve ganar.
El Betis está cansado. Quizás no de querer aspirar a todo. Pero sí sobre el césped. Pretende, pero no puede. Suma cinco partidos sin ganar y su reto de competir en los tres frentes le pasa factura. El Athletic tomó algo de aire tras caer en las semifinales de Copa. Marcelino sabe que los designios de las plazas europeas son alcanzables y agotará todas sus armas para alcanzarlas. El técnico centra muchos focos por el proceso electoral que empieza a asomarse y culminará en junio buscando a un sucesor a Elizegi. Hay en escena dos candidatos. Pero Europa exige más. ¿Lo tiene este Betis en plena crisis de fuerzas? ¿Lo tiene el encomiable espíritu del Athletic?
Pellegrini insiste en no priorizar. Colocará sobre el césped del Villamarín a sus mejores bazas sin condicionarlo a que cuatro días más tarde se juegue su supervivencia en la Europa League. El chileno quiere compensar el cansancio físico con una renovada energía anímica. Para ello debe ganar y hace mucho que no lo hace. Canales llega pero quizás se reserve ante el dolor de su fisura en un dedo del pie. Bellerín y Álex Moreno siguen fuera y obligan a otra improvisación en las bandas. Quizás entre en escena Joaquín, protagonista con tres goles en el último triunfo bético contra el Athletic en 2019.
Al Athletic le sobran motivos para creer. Muniain construye, Iñaki Williams lidera y su hermano Nico vuela. Dañar los espacios del Betis parece una premisa lógica. Para apurar las opciones de Europa, el camino arranca sin Íñigo Martínez, el jefe de una defensa muy fiable. También suspira el equipo de Marcelino por la ausencia de Dani García, la baza de carácter de su medular. El fútbol partirá de las botas de Vesga y Vencedor. La batalla por Europa está servida. Seis puntos separan al candidato y al aspirante a las puertas del tramo decisivo de Liga.
