Un Balón de Oro comprometido
Alexia Putellas ha aprovechado sus grandes éxitos (Champions, Balón de Oro, The Best...) para dar voz a la lucha por la igualdad en el fútbol.
Tuvieron que pasar 61 años para que España volviera a ganar un Balón de Oro, el segundo tras el de Luis Suárez en 1960. Y este hito ha llegado acompañado de una lección. O, más bien, de un toque de atención a un mundo, el fútbol, que tiene una gran deuda pendiente con todas las niñas, adolescentes y mujeres que, a lo largo de la historia, han tenido demasiadas barreras para poder patear la pelota.
Este nuevo Balón de Oro fue para ellas, personificadas en la figura de una Alexia Putellas (Mollet del Vallès, 28 años) que ha estado más que a la altura de las circunstancias. La mediocentro catalana, que se aleja del individualismo ("Es un premio individual, pero sin duda es un éxito colectivo", dijo tras recoger su premio en París), ha aprovechado esta oportunidad para dar un golpe sobre la mesa. "Mi objetivo es que esto se vea con normalidad", aseguró Alexia, que es miembro de la primera generación de jugadoras que ha empezado a vivir del fútbol.
Esto último es un gran paso, con un pasado demasiado injusto para las pioneras de este deporte, en una lucha en la que aún queda mucho por recorrer. Ahí es donde aparece Alexia, que no se calla ante nada ni nadie y que encabeza un discurso ejemplar y muy comprometido.
La internacional española no sólo tiene un aura especial sobre el verde, donde su talento es infinito. Con una personalidad única, presenta una imagen de mujer empoderada que pide paso en el fútbol, donde su juego y sus palabras bailan con inteligencia, educación y mucha clase para abrir más puertas a todas las niñas que quieren seguir sus pasos.
Alexia: "El fútbol nos pertenece a todos"
Su figura tiene tanta fuerza que ni la fama ha logrado alterar su humildad ("Le intento dar normalidad a todo lo que está pasando", dijo a AS) o la manera en la que afronta sus exposiciones públicas, en las que siempre aparece con calma, seriedad y cercanía. La de Mollet del Vallès no ha renunciado tampoco en ningún momento a su carácter reivindicativo, siendo el gran símbolo de la lucha por la igualdad en el fútbol femenino español.
Así, con el logro mundial de la capitana del Barça, que también fue elegida como Mejor Jugadora del Año por la UEFA y The Best por la FIFA, el fútbol español ha ganado a una gran referente a todos los niveles. Una estrella que marca el camino hacia la igualdad.
"El fútbol nos pertenece a todos", aseguró en una emotiva carta publicada recientemente en The Players' Tribune. Ella tuvo 'suerte', porque sus amigos y familia nunca rechazaron esa pasión que le ha llevado a ser la mejor jugadora del mundo, pero no por ello echa la vista a un lado. "Nunca me dijeron que no podía jugar ni me insultaron. Nadie levantaba la ceja cuando decía que quería ser futbolista", confesó Alexia, que lanzó un deseo: "Mi experiencia debería ser la de cualquier niña".
Alexia lidera una nueva dimensión
Con su éxito, Alexia ha abierto una nueva dimensión en el fútbol femenino español. Un tiempo desaprovechado de inicio por el retraso de la Liga profesional, que llegará el próximo curso y no en la presenta temporada, tal y como estaba previsto. La centrocampista catalana ha visto disparada su influencia mediática tras ser nombrada como mejor jugadora del mundo.
Su caché le hace muy atractiva para las marcas comerciales y, ahora, las niñas e incluso los niños quieren ser como ella, que luchará hasta el final en esta dura batalla por la igualdad. "El verdadero triunfo llegará cuando exista igualdad de oportunidades entre niños y niñas en el mundo del deporte", dijo. Palabra de referente.