Riazor mide su fuerza frente al mejor visitante
El Deportivo, que lleva un año sin perder en casa, busca su sexta victoria consecutiva ante un Real Unión que fue el último equipo capaz de ganarle.
La vida de Deportivo y Real Unión ha estado condicionada estas dos últimas semanas por el Covid. Los irundarras, con un brote de 13 positivos vieron cómo se aplazaba su partido ante el Valladolid Promesas. Al mismo tiempo, se suspendía la visita del Racing a Riazor después de dos positivos y tres casos más con síntomas de los cántabros, que finalmente quedaron en nada. Las numerosas bajas del conjunto vasco ponían en suspenso el partido en A Coruña, pero desde el primer momento la actitud del club fue la de intentar jugar. Con muchos de los positivos regresando poco a poco, el Real Unión encontró una solución al solicitar el cambio del encuentro del sábado al domingo, algo a lo que Federación y Deportivo accedieron y finalmente habrá partido hoy (17:00 horas).
Superada la incertidumbre, Riazor se prepara para recibir un duelo lleno de alicientes. Borja Jiménez no quiere que todos estos problemas despisten a un equipo que marcha firme en su camino para regresar al fútbol profesional. Los coruñeses, que acumulan 13 partidos sin perder, buscarán al amparo de su afición la sexta victoria consecutiva para afianzar todavía más su liderato. Claro que enfrente se presenta un Real Unión que está a las puertas del playoff y que es, junto a los blanquiazules, el mejor visitante del Grupo I. Importante credencial reforzada por otro dato: los irundarras fueron el último equipo que logró ganar al Depor (2-1) allá por el 9 de octubre gracias a un doblete de Carlos Bravo y un sobresaliente Irazusta.
Finalmente las ausencias visitantes se limitan al sancionado Beobide, Temenuzkov y al técnico Zubaika, que ha tenido que quedarse en Irún con Covid. Aunque la factura es mucho menor de lo esperado, siempre hay que añadir los días de entrenamiento perdidos y el cansancio de los afectados por Covid. Unos factores que quedarán aparcados cuando comience a rodar el balón con un plan claro: replegarse, presionar por momentos, líneas muy juntas atrás y velocidad en las contras para matar. Borja Jiménez, por su parte, cuenta con las ausencias de Trigueros, Víctor García y Villares. Su duda táctica está en apostar por De Vicente para protegerse de los contraataques o bien seguir con Soriano en la mediapunta. Con Quiles ya recuperado, el técnico blanquiazul medita entre apostar por el andaluz ante su falta de entrenamientos y Noel para jugar junto a un Miku que regresa al once después de cumplir sanción. Pólvora para el ataque coruñés en un Riazor que es la dinamita del Deportivo: más de un año sin perder en casa.