La plantilla del Málaga, bajo sospecha
El rendimiento de un grueso importante del equipo está muy en entredicho y, en algunos casos, es inexiste. Hay notables carencias en ataque y en defensa.
El Málaga cerró el mercado de fichajes sin novedades de última hora. Las negociaciones que el club tenía en marcha (alguna incluso bien encaminada) no fructificaron y la dirección deportiva, capitaneada por Manolo Gaspar, declinó realizar ninguna incorporación. En el Málaga tienen muy claro que no es aconsejable "fichar por fichar" y que solo hay que acometer aquellas incorporaciones que sirvan para mejorar realmente el nivel competitivo de la plantilla, actualmente muy en entredicho.
Las estrechuras salariales también han complicado sobremanera los movimientos en el mercado después de las llegadas de Febas y Vadillo. Finalmente, solo se concretó la marcha de Iván Calero, lo que no liberó demasiado margen para poder acometer más operaciones. Aun así, está por ver el nivel de Adrián López cuando empiece a ejercitarse en La Rosaleda porque no se descarta su incorporación si los técnicos le ven en un estado adecuado para ayudar al equipo. Además, tampoco se pierde de vista la posibilidad de poder incorporar a algún otro jugador que se encuentre actualmente sin equipo. El Málaga dispone actualmente de dos fichas libres.
Por el momento, le toca a Natxo González y a los jugadores que ya estaban en Martiricos a principios de enero revertir la crisis que azota al Málaga y que tiene a la plantilla bajo sospecha. Y es que el rendimiento de la inmensa mayoría de los futbolistas blanquiazules ha caído en picado y, en algunos casos, ha sido inexistente.
La Rosaleda, más allá de pedir en varias ocasiones la destitución de José Alberto, también apuntó contra los jugadores en el duelo ante el Ibiza y la indignación en torno al equipo se ha disparado. La respuesta de la plantilla fue encajar otra goleada y firmar un nuevo ridículo en Anduva. Hay muchos futbolistas señalados. Jugadores como Sekou, Antoñín, Dani Martín, Peybernes, Lombán, Cufré, Brandon o Jairo están muy por debajo de lo mínimamente exigible. Incluso otros hasta hace poco más fiables como Escassi, Víctor Gómez, Juande, Jozabed o el canterano Ramón han dado varios pasos atrás alarmantes. De los fichajes invernales, las buenas sensaciones del estreno ante el Sporting y nada más (Vadillo ha encadenado varios problemas físicos).
Las carencias en las áreas existen y son indisimulables. Sin noticias de Sekou y con Chavarría 'missing' por culpa de las lesiones, la falta de gol es una certeza (23 tantos a favor, solo más que Alcorcón, Real Sociedad B, Fuenlabrada y Zaragoza). A nivel defensivo, el equipo está cogido con alfileres y la nueva lesión de Juande ha hecho saltar otra vez las alarmas. En este sentido, los blanquiazules han perdido competitividad y sus registros ya son sonrojantes (38 dianas encajadas). Únicamente el colista y casi desahuciado Alcorcón (47) recibe más goles que este Málaga de mantequilla.
El reto que tiene por delante Natxo González es notable y está plagado de deberes. Entre ellos, dotar al equipo de una consistencia imprescindible para competir en Segunda División y darle automatismos ofensivos que permitan generar más juego de ataque y mejorar sus registros goleadores. Aunque para invertir de forma radical la dinámica tan negativa que arrastra el equipo es imprescindible que los jugadores den un paso al frente y mejoren notablemente su rendimiento, hasta ahora muy deficiente.