Un Girona venenoso
El conjunto rojiblanco ha marcado en 22 de los 26 encuentros que lleva disputados esta temporada. La última que se quedó a cero fue el 9 de octubre de 2021, ante el Lugo.
El Girona puede presumir actualmente de multitud de cosas porque la mayoría funcionan, pero una de las que más le están catapultando es la facilidad con la que sus jugadores están viendo portería. El juego de combinación, ofensivo y vistoso por el que ha apostado Michel está dando sus frutos y se han erigido ya en el cuarto bloque más goleador de Segunda con 32 tantos. Tan solo le superan los tres primeros clasificados, Almería (38), Valladolid (35) y Eibar (35). Pero la dinámica que arrastra el conjunto de Michel asusta y es, sin duda, el bloque más en forma de la categoría.
Los goles son los que marcan la felicidad en los equipos de fútbol y en Girona están subidos en una nube. En lo que se lleva de temporada ha disputado 26 partidos (23 de Liga y tres de Copa) y en solo cuatro se ha quedado a cero: ante Las Palmas, Málaga, Oviedo y Lugo. Este es un dato que indica que ha marcado en el 85 por ciento de los encuentros de esta campaña y ahí se está cimentado su mejoría y crecimiento porque la última vez que se quedó a cero fue el 9 de octubre de 2021, contra el Lugo (ahora encadena 17 duelos seguidos marcando). Las cuentas le salen al vestuario gerundense y es que con la segunda vuelta por delante está asentado entre los seis primeros clasificados y tiene al Valladolid, segundo, a solo seis puntos de distancia.
El gol en el Girona tiene nombre y apellidos porque seguir el ritmo a Cristhian Stuani es casi imposible, suma 15 tantos este curso, pero, contando al uruguayo, hasta 16 futbolistas han festejado, como mínimo, un gol en Liga o Copa del Rey. Los máximos perseguidores de Stuani son Nahuel Bustos con cuatro tantos y Àlex Baena con tres.