Catalán: "Nos van a tener que matar para que el Levante no esté en Primera"
El presidente del Levante lamentó los resultados del últimos ejercicio, con más de 23 millones de pérdidas, y achacó el déficit a los efectos de la pandemia.
Quico Catalán presentaba ante los accionistas del Levante las primeras pérdidas en sus 12 años al frente de la gestión del club. 23,2 millones correspondientes al ejercicio 2020-21. "Lamentamos profundamente este resultado, no es propio desde nuestra llegada", aseguró el presidente, pidiendo disculpas por la gestión y achacando los números a la aparición de la pandemia.
"En 2019 nos presentábamos con superávit y nos planteamos un nuevo escenario, una nueva estrategia de gestión que nos ayudara a consolidar al equipo en Primera Division y así conseguir una revalorización de nuestros activos". La estrategia de cambio planteada, que pasaba por la venta de futbolistas tras explotar esos activos deportivamente en el club, en palabras del presidente, se fue al traste por los efectos del COVID. "Tres meses después de aquella Junta cambio nuestra forma de relacionarnos, nuestros hábitos... en definitiva nuestra vida. Desaparecieron los mercados", matizó Catalán.
De 15 millones en ventas de jugadores a poco más de un millón en un año por los efectos de la pandemia, como reflejan las cuentas, cuando la media ha sido históricamente superior a los 17 millones de euros por temporada en los años en Primera División. "Ha sido un impacto en las cuentas del club", manifiesta Ignacio García, Director Financiero del club.
"Ha sido imposible reconducir la estrategia tomada en 2019", reconoció el presidente. A lo que añadió: "Podríamos haber malvendido nuestros activos, pero no queríamos debilitar la parcela que nos permite crecer: la deportiva. La pandemia nos ha llevado a la mayoría de clubes a un escenario de pérdidas". El Levante es hoy colista de Primera División, con 25 encuentros consecutivos sin ganar en la competición doméstica, superando el récord de LaLiga.
Precisamente el déficit de 23 millones corresponde a la incapacidad para vender los 16,5 millones de euros estipulados en las cuentas para cerrar el ejercicio con superávit. Hoy, precisamente, se sometía un presupuesto con un ligero beneficio (89.000 euros) después de impuestos en la 2021-22 supeditado, entre otras cosas, a traspasar jugadores por 10,5 millones antes del 30 de junio de 2022. El problema es el mismo un año después.
No obstante, Catalán pidió respaldo por sus 12 años de gestión y unidad ante la crisis deportiva, con el descenso amenazando a la entidad. "Dejamos atrás once temporadas consecutivas con superávit, que habían reforzado nuestra credibilidad ante socios y acreedores". Estas fueron sus palabras: "Defenderemos lo que para nosotros es un tesoro, estar en Primera División, algo que solo hemos conseguido 15 años de nuestra historia, 12 temporadas en los últimos años. Las nuevas generaciones no contemplan otro escenario. Por ellos, los más pequeños, por los mayores, por los que lucharon por este club, vamos a luchar hasta el final".
"De todo corazón, les pido esta unión. Nuestros jugadores son nuestras verdaderas armas para conseguirlo. Ayudarles es ayudar al Levante, a nuestro sentimiento, a nuestra historia. No vamos a tirar la toalla. Quedan 60 puntos, y nos van a tener que matar para que alguien no cuente con el Levante en Primera el año que viene".