FRANCIA | COPA DE FRANCIA
El pequeño a la sombra del PSG en París
El París F.C lleva años intentando ascender a la Ligue 1 para darle a la capital francesa un derbi. Fue comprado por un fondo de Oriente Medio en 2020.
Cuando nos hablan de París, a uno generalmente se le viene a la cabeza la Torre Eiffel, los Campos Elíseos, el barrio de Montmatre y, sobre todo, el río Sena. Nunca el fútbol. Ahora quizá más que antes, ya que el PSG ha conseguido formar un compendio de estrellas, pero el balompié nunca fue rey en París. El fútbol está ahí, pero no es la preocupación de los aficionados. De todas las capitales europeas, París es de las pocas que no tiene más de un equipo en primera división y eso ha provocado un desapego enorme de todos los ciudadanos.
El París F.C fue diseñado principalmente en 1969 para ser el primer equipo de la capital francesa. No fue el PSG, ya que el Ayuntamiento consideraba "Saint-German" (Saint-Germain-En-Laye) una localidad que estaba fuera de la periferia de París. En 1970, el conjunto parisino surgió a través de una fusión que involucró al París F.C y al Stade Saint-Germanois. Aquello fue el inicio del PSG tal y como lo concebimos hoy en día, pero no del París F.C, que decidió escindirse al considerar que el Ayuntamiento no le había favorecido con la fusión y que todos los focos iban a ir para el PSG.
El fútbol como tal no nació en París hasta 1970. Si tenemos en cuenta los equipos de la ciudad, hay dos que cohabitan antes que la mencionada fusión. Uno es el Racing Club de France, el primer rico de la capital francesa en los años 80 bajo la denominación de Racing Matra y que actualmente se encuentra en National 3, equilvalente a la quinta división del fútbol francés, y el otro es el Red Star, el equipo comunista de Saint-Ouen al que el Ayuntamiento ha llevado al ostracismo para no darles ningún tipo de ayuda por no estar ubicado estrictamente en la capital francesa. Sin embargo, ambos nunca han coincidido en la Ligue 1 ni tampoco le han retado al PSG, salvo de forma tímida en los años 80, a quitarle el reinado de la ciudad.
El París F.C es, actualmente, el segundo equipo de París. Lleva cuatro temporadas rozando el ascenso a la Ligue 1 y gracias a las inversiones de Pierre Ferracci, amigo íntimo de Macron, el equipo ha experimentado una evolución extraordinaria durante los últimos años. El club ha decidido invertir en infraestructuras, aprehendiendo un complejo cerca del aeropuerto de Orly para desarrollar tanto la cantera como al equipo femenino (es uno de los mejores equipos de Francia en cuanto a fútbol femenino se refiere) y que sueña con forjar una gran rivalidad con el PSG en caso de ascender a la Ligue 1.
Este equipo, que no pisa la Ligue 1 desde la temporada 1978/1979, se enfrenta esta noche al Olympique de Lyon en la Copa de Francia. Su estadio, el Stade Charléty, genera crispación en los aficionados, pues tiene una pista de atletismo que dificulta muchísimo la visión nítida de los jugadores y, además, el hecho de que el club no cuente con una importante masa social hace todavía más difícil que haya más adeptos a la evolución del equipo. El Charlety tiene capacidad para 20.000 espectadores. Nunca se ha llenado. Hoy se espera que haya 13.000 espectadores en las gradas, una afluencia extraordinaria, pero que no supera los más de 14.000 que inundaron el campo en 2019 para ver perder al París F.C. en una dramática tanda de penaltis ante el Lens en los playoffs para la Ligue 1.
"Si ascendemos a la Ligue 1, quiero un Charléty renovado y sueño con ver un partido ante el PSG con el estadio lleno. Hay que acercar a la gente al césped y darles más hospitalidad a los aficionados. No le diré exactamente al Ayuntamiento de suprimir la pista de atletismo, pero si ascendemos a la Ligue 1 hay que renovarlo", nos confiesa Ferracci, presidente del París F.C, en una entrevista que aconteció este jueves a pocas horas de disputar el trascendental encuentro contra el Olympique de Lyon de la Copa de Francia.
La cantera, el motor del club
Si hay una razón que explica el crecimiento reciente del París F.C, esa es su cantera. Pierracci, actual presidente, decidió invertir fuertemente hace más de un lustro para que el club tuviera más facilidades a la hora de competir en la segunda división del fútbol francés. Por su centro de formación han pasado jugadores como Ibrahima Konaté, actualmente en el Liverpool, Nordi Mukiele, internacional francés que sigue brillando en el Leipzig o el prometedor Hannibal Mejbri, jugador por el que el United pagó 10 millones de € al AS Mónaco y que se formó en el pequeño centro de entrenamiento de Voie de Seules, a pocos kilómetros del aeorpuerto de Orly.
"Es mucho más difícil mantener a los jugadores cuando el equipo está en la Ligue 2. Si ascendemos, los futbolistas tienen opciones reales de llegar a debutar en la Ligue 1. Todos se van ahora con 13-14 años al PSG, que tiene mucho más dinero y juega en otra división, por lo que el objetivo sigue siendo, además de ascender, la de formar a los jóvenes", nos cuenta Kévin Briand, jefe de comunicación del París F.C y que también subraya que el club ha invertido 10 millones de € para mejorar las instalaciones. El centro de formación cuenta con dos campos, uno sintético, para que sea más fácil entrenar, además de disponer de un gimnasio novedoso en el que conviven tanto el primer equipo masculino como el femenino, que hace poco estuvo cerca de dar la sorpresa contra el Olympique de Lyon en la D1 Femenina, aunque cayó derrotado finalmente por un resultado apretado de 2-1.
Para Ferracci, la formación también es un aspecto fundamental: "Hay que tener buenos medios financieros con el objetivo de invertir en la formación del club y tener en el equipo al mayor número de jugadores criados aquí. La ventaja que tenemos es que en los campeonatos inferiores somos un buen club formador que ya es profesional con estas instalaciones. Eso hace todo más fácil". El París F.C cuenta con una de las mejores canteras de Francia actualmente. Hay muchos internacionales sub19, sub18, sub 17 o sub 16 y el equipo le está quitando poco a poco cuota de mercado al PSG, que invierte cada vez más en los mejores talentos de la Isla de Francia. Es por ello por lo que Pieracci lleva invirtiendo durante tantos años en la cantera, pues el empresario considera que es un atajo mucho más rápido para buscar el ascenso a la Ligue 1.
El último gran producto que fraguó el París F.C en su prestigiosa cantera fue Silas Wamangituka (1998). El delantero realizó una campaña extraordinaria en la 2018/2019, anotando 11 goles y haciendo soñar al conjunto parisino que el ascenso a la Ligue 1 era posible. Acabó traspasado al Stuttgart, pero aquello volvió a ensalzar el gran trabajo de los formadores de Orly. "Wamangituka representa el modelo que tenemos aquí. Formamos a los jóvenes, les damos oportunidades y se sienten importantes en un equipo que tiene como objetivo ascender a la Ligue 1", destaca Kevin Briand.
Sueñan con ser el rival del PSG
Pierre Ferracci es una persona de culto en el París F.C. Desde que llegara a la presidencia del club en 2006, los parisinos han experimentado un ascensión sin precedentes, tanto en la cantera como en el primer equipo. En pocos años, el París F.C ha pasado de ser un aspirante a un verdadero candidato a ascender a la Ligue 1. Todo gracias a su visión empresarial, ya que es hijo de un empresario corso y adquirió desde muy joven el conocimiento de cómo gestionar una entidad, ya sea deportiva o mercantil.
Criticado por ser íntimo amigo de Macron, desatando rumores de que fue gracias a su influencia lo que provocó en 2020, justo después de la pandemia, el parón definitivo de las competiciones en Francia (El París F .C. se encontraba muy cerca del descenso y la decisión del Ejecutivo le salvó definitivamente en la Ligue 2), Ferracci quiere hacer de su equipo un ogro del PSG. Su objetivo es el de forjar un derbi a la altura del Lazio-Roma en Italia o el Real Madrid-Atlético de Madrid en España y no va a parar hasta ver al club en la máxima división del fútbol francés.
Hace poco más de un año, Ferracci consiguió un acuerdo con un Fondo de Inversión de Bahréin para que se convirtiera en uno de sus accionistas, obteniendo el 20 % de la participación en el París F.C. Aunque aquello se interpretó como el nacimiento de "un nuevo PSG", el empresario dispone actualmente del 50 % del club, es decir, que por mucho que Oriente Medio quiera invertir, todas las decisiones que se adopten deben tener, sí o sí, el visto bueno de Ferracci. Al ser preguntado por si Bahréin invertirá fuertemente si el París F.C asciende a la Ligue 1, el presidente responde: "Tendremos los medios financieros para mantenerlos en la Ligue 1. Por hacer un paralelismo, seremos como el Atlético de Madrid, pero no seremos un PSG. La competencia con el PSG es muy difícil, pero si nos fijamos en otros campeonatos, la Juventus tiene mucho dinero y mismamente no domina su campeonato".
Ferracci sueña con hacer del PSG-París F.C. un derbi capitalino que se siga por todo el país. Eso aumentará, principalmente, el número de aficionados que acudan cada fin de semana al Stade Charléty. Por otra parte, el club cuenta con medios financieros suficientes como para hacer fichajes importantes y consolidarse en una competición que no pisa desde hace más de 40 años. Para ello, ascender esta temporada es una prioridad. El París F.C está 4º actualmente en la Ligue 2, únicamente a dos puntos del líder, el Ajaccio, por lo que el ascenso no es una posibilidad, sino una realidad. Tanto Kevin Briand, jefe de comunicación del club como Ferracci rezan cada día para que la Copa de África se suspenda. En enero, el París F.C se juega el ascenso a la Ligue 1 y la plantilla se verá reducida notablemente en caso de que la mayor competición africana de selecciones se termine disputando.
Para ascender a la Ligue 1, el París F.C decidió confiar en uno de los mejores entrenadores de la última década en la Ligue 2. Thierry Laurey dejó el Estrasburgo en verano para intentar, de una vez por todas, devolver a los parisinos a la máxima división del fútbol francés. El de Troyes ya sabe lo que es ascender a la Ligue 1 en dos ocasiones. Lo consiguió con el Gazélec Ajaccio, subiendo primero a la Ligue 2 y después a primera división y después volvió a obrar la proeza con el Estrasburgo, un histórico del fútbol francés con el que finalizó un ciclo glorioso logrando la ya extinta Copa de la Liga en 2019. De momento, el técnico ha devuelto la ilusión a las abandonadas gradas del Charléty, que suman récord de afluencia esta temporada y sueñan con ver un derbi el próximo año en la Ligue 1.
Esta noche, a partir de las 21 horas, el París F.C. intentará lograr la machada contra el Olympique de Lyon. Peter Bosz, entrenador del conjunto del Ródano, ya ha avisado en rueda de prensa de que no va a reservar y que saldrá con su once de gala. Por su parte, Laurey, que ya sabe lo que es ganarle al Lyon tanto en Ligue 1 como en Copa (dando la sorpresa precisamente en 2019 con el Estrasburgo antes de ser campeón), no tiene miedo a uno de los mejores equipos del fútbol francés. Quién sabe si esta noche el Charlety vivirá una de las noches más especiales de la temporada, antes de materializar en mayo el ansiado ascenso a la Ligue 1.