A intentar lo que nadie ha conseguido
El Unionistas es el único equipo que no ha perdido un partido en la cancha, mientras que el Racing solo ha cedido un empate y un gol en contra en Santander
Un reto difícil. Así ha definido Guillermo Fernández Romo a lo que le espera a su equipo este fin de semana: intentar ganar al Unionistas, algo que no ha logrado nadie esta temporada (oficialmente ha perdido con el Dux 3-0, pero fue en los despachos ya que los 90' acabaron 0-0). Dos victorias y cuatro empates, con solo dos goles en contra, ahí es nada. Los números del Racing en su estadio no le auguran una tarde más placida a Dani Mori y los suyos: cinco victorias y un empate, contra el Depor, y un solo gol en contra. El que gane mañana habrá conseguido romper una racha extraordinaria a su rival. Si es que lo consigue alguno de los dos.
El Racing recupera para este partido a su dos jugadores más determinantes, Pablo Torre y Cedric. El de Soto de la Marina ya recuperado del esfuerzo físico que le supuso su paso por la Sub-19 y que le costó la suplencia en Zamora y el nigeriano aun más descansado y contento. Descansado tras dos partidos de baja por sanción y contento tras la renovación por tres temporadas, hasta 2025, anunciada ayer por el Racing. A cambio de estas buenas nuevas, Romo no podrá contar con Borja Domínguez, que vio en Zamora su cuarta amonestación del curso, ni con el lesionado Bobadilla.
Después de dos partidos muy sólidos en defensa y aseados en ataque, frente a Bilbao Athletic y Zamora, no parece probable que el técnico racinguista modifique gran cosa en su once, más allá de los relevos de manual: Torre y Cedric por Domínguez y Manu Justo. Ha hablado en rueda de prensa de lo que le preocupa las bandas unionistas, insinuando posibles refuerzos en los costados (Satrústegui al lateral o Íñigo a un carril), pero parece más un plan B que la alineación de saque.
No parece verosímil que romo se cargue la dupla Tienza-Íñigo, los dos pivotes más físicos y más defensivos, que tanta solidez ha dado a su equipo, con tres victorias y un empate en las cuatro jornadas que han formado el doble pivote de inicio. Solo una vez, en Ferrol, por cierto, coincidieron con Pablo Torre en la mediapunta. Hoy puede ser la segunda. Más posible, aunque no probable, parece la posibilidad de devolver a Satrústegui al lateral izquierdo, a costa de sacar del once a Simón y meter a Mantilla de central.
Dani Mori, conocido en Cantabria por su paso por la Gimnástica, solo tiene una baja que lamentar, pero es una de las más importantes, la del extremo bilbaíno Íñigo Muñoz, una bala por la derecha y que fue compañero de Satrústegui en el Castellón. Un problema menos para los racinguistas. Las huestes del asturiano suelen ser fieles al 4-4-2, no permiten que se les presione el saque de balón (si hay que pegar en largo, se pega) y arriba siempre puede contar con el talento de Pablo Espina, un clásico de la Segunda B. Los salmantinos no estarán solos en El Sardinero ya que 600 de los suyos ya viajan con entrada desde casa. Bueno, en realidad, salmantinos serán los de la grada, los del césped serán unionistas, ya que el único charro de la plantilla es el veterano Carlos de la Nava.
(Foto superior: Simón Luca, cántabro de Cícero, posando para AS en el Museo de prehistoria y arqueología de Cantabria)
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