Momento Pintus

Cuando quedan menos de seis semanas para que acabe el año, el Madrid arranca una de sus primera etapas alpinas de la temporada. Los blancos jugarán nueve partidos entre Liga y Champions donde se medirán a Granada, Sevilla, Atlético, Athletic de Bilbao (dos veces, ambos en miércoles por ser partidos aplazados), Real Sociedad y Cádiz (en este falta por concretar oficialmente si será el 18 o el 19 de diciembre) en Liga, y al Sheriff (en un largo viaje) y al Inter, en Champions. Un total de nueve partidos en 32 días. Uno cada tres días. Llega el Momento Pintus...

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Antonio Pintus (59 años) fue el encargado de poner en orden todo el aspecto físico desde 2016 hasta 2019 cuando Zidane, su otrora valedor, se sentaba en el banquillo blanco. Este pasado verano fue contratado como jefe de la preparación física de todos los equipos del club blanco, desde el primer equipo hasta pasando por los de las categorías inferiores. De su preparación, junto a las decisiones de Ancelotti, dependerán en buena medida que el liderato de los blancos se consolide, así como el acceso a la siguiente fase de la Champions.

El regreso de Pintus al conjunto blanco fue acogida de manera notable por todos los sectores: directiva, jugadores y afición, al que consideran el elemento invisible de los triunfos blancos. Nadie olvida el repaso físico de los madridistas a la Juventus en la final de la Champions de 2017. Pintus llegó con la idea de llevar a los jugadores a su máximo potencial físico y evitar lesiones. Con dobles sesiones en el comienzo de la pretemporada, los blancos salieron en tromba en los primeros partidos de la campaña. Ahora, tras pasar un valle físico, deben volver a recuperar ese pico de comienzos de la temporada.

Sin embargo, hasta ahora no ha podido frenar la hemorragia de lesiones musculares que han asolado a los blancos en las dos últimas temporadas. En la actual plantilla son conscientes del exigente calendario que se les avecina, pero se ven preparados para superarlo. Gracias, entre otros, al disciplinado Pintus y a sus métodos. Llega su momento...