EL DERBI SEVILLANO

Aprobados y suspensos del Betis: Guido se inmoló y el derbi se acabó

El Betis intentó no bajar los brazos tras la infantil doble amarilla del argentino en la primera parte pero ni Pellegrini dio con la tecla ni sus jugadores pudieron sobreponerse

Sevilla
José Manuel VidalEFE

Como se esperaba, Pellegrini volvió a realizar una rotación masiva en su once titular respecto al que cayó en Leverkusen el jueves. Sin embargo, los ochos cambios realizados poco pudieron hacer en un derbi que quedó marcado en el momento en el que Guido Rodríguez fue expulsado. Los intentos del técnico chileno por compensar el equipo al inicio del segundo tiempo, y de ir por el empate cuando se vio por debajo en el marcador, naufragaron.

Bravo: Poco que hacer en los goles encajados, atento en todo lo demás.

Bellerín: Su ímpetu ofensivo le hizo caer en fuera de juego en la acción en la que el Betis se pudo adelantar en el marcador. Del gol en propia puerta, poca culpa tiene.

Pezzella: Superado por un Rafa Mir que no tuvo su mejor día ni muchísimo menos. Pareció estar pensando aún en su fiasco en el Wanda.

Edgar: Dio la cara en todo momento y muy poco se le puede reprochar.

Álex Moreno: Tímido en ataque y sufriendo en defensa.

Guido Rodríguez: Ninguna de las dos amarillas que vio tuvo discusión. Pero en caso de que hubiera alguna duda, un jugador del nivel y el poso que se le presupone no puede hacer en la vida la falta que dio lugar a su segunda amonestación sabiendo quién pitaba y dónde estaba el listón. Suena duro, pero es el principal culpable de la derrota bética.

Guardado: Empezó con brío pero el méxicano no parece estar ya para batallas de este calibre.

Rodri: Apagado y con poco protagonismo, se partió la cara corriendo para atrás.

Fekir: La única chispa de luz a la que pudo agarrarse el beticismo en el derbi.

Canales: Gris oscuro, casi negro.

Willian José: No le llegaron balones en el primer tiempo y fue sustituido al descanso.

CAMBIOS

Carvalho: Salió para intentar sostener a un Betis con diez y estuvo muy lejos de conseguirlo.

Tello: Un par de ocasiones y una amarilla.

Juanmi: Escarceos infructuosos.

Joaquín: Su entrada sólo se justifica para engordar sus estadísticas. Y ni así.

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