El Cádiz se recuperó en Vila-real
A pesar de que el empate de Danjuma hizo mucho daño a los de Cervera, hay diversos aspectos positivos que se sacan del punto cosechado en La Cerámica.
El empate in extremis en casa del Villarreal hizo mucho daño a un Cádiz que ya acariciaba los tres puntos. Danjuma, en el minuto 94', arrebató a los amarillos la posibilidad de conseguir una victoria que les hubiera permitido escapar de los puestos de descenso. Aunque algunos antes del partido firmarían el empate ante un rival como el Villarreal, la manera en la que se dio fue un mazazo para los jugadores de Cervera. Sin embargo, hay que quedarse con lo bueno del empate y es que hubo muchos aspectos positivos que hacen mirar al futuro con optimismo.
Vuelve a ver puerta
Los últimos tres partidos antes de Vila-real tuvieron un denominador común: la falta de gol. El Cádiz no marcó ante Valencia, Espanyol y Alavés. En La Cerámica acabó la mala racha del equipo amarillo que vio puerta hasta en tres ocasiones. En las diez jornadas anteriores se habían marcado tan sólo siete tantos. Además, en el partido ante el Villarreal se consiguió la mayor cantidad de disparos a portería de la temporada, con cuatro; igualando el registro del partido contra el Alavés.
El Choco Lozano guía
Los tres goles de Vila-real fueron de un inspirado Choco Lozano, que pasó a la historia como el primer jugador amarillo en marcar un hat-trick como visitante en Primera División. Al hondureño le salió todo... o casi todo. Tuvo una buenísima oportunidad para hacer el cuarto de su cuenta, pero Asenjo estuvo atento. El Cádiz debe agarrarse al buen momento de su ariete para aspirar a salir de las posiciones bajas de la tabla. Ahora mismo es, con cuatro, el máximo goleador del equipo. El partido ante el Mallorca será otra gran prueba.
Álex lidera
Álex volvió a la titularidad tras dos partidos empezando en el banquillo y fue fundamental. El centrocampista dio la asistencia del primer gol de Lozano, con un perfecto centro medido. Durante todo el encuentro se le vio muy participativo, apareciendo tanto por el centro como por las bandas donde buscó asociaciones. Es por ello que Cervera le 'premió' con los 90 minutos, algo que no pasaba desde el pasado 29 de agosto contra Osasuna.
El 4-1-4-1, del gusto de Cervera
El 4-1-4-1 que parecía que sería un sistema eventual, finalmente, ha venido para quedarse. Este esquema da al equipo más poderío en el centro del campo, sumando un centrocampista más que acompañe a los fijos del doble pivote. Si ante el Espanyol el técnico ya salió contento por las dificultades en que puso por momentos a los catalanes, contra el Villarreal fue la prueba definitiva para demostrar que se puede alternar con sus habituales 4-4-2 o 4-2-3-1. Fali se ha adueñado del puesto de centrocampista defensivo cuando Cervera pone el 4-1-4-1 y ayuda tanto a la pareja de zagueros, como lanza al equipo al ataque. Ante el Villarreal, el valenciano redondeó una buena actuación con la asistencia del segundo gol de Lozano, en una falta botada en la frontal.