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LEVANTE

JIM recuerda la hazaña del liderato: "Aún se me pone la piel de gallina"

El 23 de octubre de 2011, hoy hace diez años, el Levante de Juan Ignacio Martínez tocó el cielo de Primera División. El técnico alicantino lo recuerda para AS.

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JIM recuerda la hazaña del liderato: "Aún se me pone la piel de gallina"
ALBERTO IRANZODIARIO AS

El 23 de octubre de 2011, el Levante tocó el cielo de Primera División. Diez años han pasado desde que el doblete de Juanlu y el gol de Koné en el Madrigal catapultó al equipo a lo más alto de la tabla. Una década, se dice pronto. La 2011-12 queda en el recuerdo de la grada de Orriols como la mejor temporada de la historia del club en la máxima categoría del fútbol español.

"Llevábamos cinco victorias consecutivas, el equipo estaba en Champions, pero lograr el liderato, venciendo 0-3 en Villarreal, que era un equipo de Champions con Borja Valero, Gonzalo, Rossi, Cani, un equipazo...", asegura Juan Ignacio Martínez, director de orquesta de aquel equipo, para AS.

Y es que, tras los tres puntos en Villarreal, con un gran número de aficionados desplazados, los levantinistas fueron en masa a recibirlos a las puertas del estadio pese a ser las dos de la madrugada para celebrar el liderato. Una imagen que refleja la comunión entre la afición de aquellos años.

"Lo recuerdo hoy y aún se me pone la piel de gallina, es como un sueño, la cantidad de personas que hubo en El Madrigal y luego el recibimiento en el Ciutat, ya bastante de noche. El autobús iba a 10 por hora de la gente que había. Además, Raimón encendió el estadio como si hubiera partido y colocó la bandera del Levante como líder. Fue muy bonito y emotivo", confesó el alicantino.

Lo cierto es que la clave del éxito de ese Levante residía en el ambiente del grupo. En el evento del pasado miércoles, Rubén Suárez, por ejemplo, afirmaba que llegaban hasta una hora antes al entrenamiento "para estar de cachondeo". Era otro fútbol, en el que el Levante se movió como pez en el agua.

"La verdad es que nadie se esperaba arrancar así. El equipo había salvado la categoría la temporada anterior faltando dos jornadas... Era mi primera experiencia en Primera y esa etapa en el Levante cambió mi carrera", recuerda JIM, cuya experiencia en Orriols le abrió diferentes puertas en su trayectoria.

Aquel Levante comenzó el año como un tiro. Y es que, pese a empatar en las dos primeras jornadas ante Getafe y Racing de Santander, la victoria en casa frente al Real Madrid de José Mourinho, con el solitario gol de Arouna Koné, le catapultó a una racha de siete encuentros consecutivos con victoria. El partido en cuestión en Villarreal, fue el penúltimo de aquella consecución de partidos, ya que la inercia continuó ante la Real Sociedad y se vio frenada en el Reyno de Navarra (Osasuna), ya en la jornada 11.

"Ese colchón que cogimos al principio nos sirvió para hacer la mejor temporada de la historia alcanzando la Europa League y quedándonos muy cerca de la Champions", reflexiona Juan Ignacio.

Ahora el club recupera parte de ese ADN con la figura de Javi Pereira, actual entrenador del equipo y segundo en la etapa de Juan Ignacio, que toma las riendas del equipo desde la destitución de Paco López. "Javi Pereira fue partícipe de aquel éxito", reconoce el actual técnico del Zaragoza. "Quizá tengo mucho que agradecer a estos jugadores de que yo esté aquí por haber sido parte de esa historia, por hacerme mejor entrenador", reconoció el pacense en el emotivo acto en el Ciutat de València.

"El equipo basaba su éxito a través del bloque defensivo y tenía mucha experiencia... Y luego estaba Koné. Los contraataques nuestros eran mortales. Se nos tildó de que éramos muy defensivo. Pero un equipo defensivo es imposible que gane siete partidos seguidos. Teníamos muchos automatismos. Jugábamos muy atrás, pero éramos muy rápidos: Valdo, Juanlu, Barkero, Koné...", apunta para cerrar Juan Ignacio Martínez. Sergio Ballesteros, capitán de aquel equipo e icono granota, aseguró sin pestañear que "si Koné no se lesiona, entramos en Champions". La anécdota del marfileño, eso sí, queda para la historia. Como el liderato conseguido hace diez años en el Madrigal.