El Yamiq regala un punto al Málaga
La jornada pudo y debió ser muy buena para los de Pacheta, pero sé quedó en la suma de un simple punto y la oportunidad desaprovechada de sacar tajada de los fallos de los rivales más directos. Porque, no nos engañemos, en una Liga en la que hay que ganar entre 21 y 23 partidos para subir, los empates no son un buen resultado. Los empates son un mal menor, también necesario entre diez o doce veces, pero no es lo ideal. En esta última jornada han fallado Ponferradina, Sporting, Almería, Eibar y Real Valladolid. El punto de Las Palmas en Almería me parece menos fallo y el gran beneficiado de la jornada ha sido el Tenerife que se coloca cuarto y empieza a entrar en las quinielas. Y aunque para Pacheta este es el camino, la realidad es que el Valladolid acumula tres derrotas seguidas, un triunfo ante el Alcorcón, que sigue colista, y dos empates que no le han permitido acercarse al objetivo inicial de subir como primero o segundo.
Es verdad que queda mucho, que esto está todavía casi empezando, pero seguimos sin ver a ese equipo sólido y fiable que vaya cogiendo la velocidad de crucero en la competición. El Valladolid sigue siendo un equipo que aparenta ser mejor que el rival, que es capaz de poner muchas pelotas al área pero que crea pocas ocasiones de gol y que concede demasiado en defensa. El penalti que cometió El Yamiq es para que se lo haga mirar. El Málaga, un equipo bastante ramplón, se llevó un punto de Zorrilla y eso es lo que no puede pasar si se quiere dar el salto de verdad a la parte alta de la clasificación. No olvidemos tampoco el detalle de que los de Pacheta han jugado con cuatro de los seis últimos de la tabla y que con dos de esos equipos ha perdido, Girona y Burgos. La conclusión es clara, la mejora parece que debe ser mucho mayor de los que se desprende tras la ruedas de prensa del entrenador.
Por cierto, sigo sin entender el cambio de Cristo por Anuar. Debió ser el premio al delantero canario por la espectacular asistencia que le dejó a Plano para marcar el gol. Y no digo que Anuar jugara mal o que Plano no rindiera bien de segundo delantero. Digo lo que digo, que nunca hubiera quitado a Cristo con empate en el marcador cuando estaba jugando bien.
Y, por último, un apunte sobre el Real Valladolid Promesas. Lo hizo todo para ganar en Almendralejo, menos meterla entre los tres palos. Un penalti fallado, dos postes, un balón sacado en la raya, dos manos a mano y Casto, el portero del Extremadura, haciendo el partido de su vida. Eso fue lo que pasó. La realidad de la tabla es la que es, por supuesto, pero los de Baptista, además de jugar muy bien al fútbol, merecerían tener bastantes puntos más, aunque la realidad les tiene en el fondo de la tabla de donde espero que pronto puedan salir. Lo merecen.