La trampa de Lopetegui

La tercera jornada. Siempre la misma. Esa es la barrera de Julen Lopetegui en el Sevilla. El muro que le ha privado hacer el nueve de nueve desde que aterrizó en el Pizjuán. En su día, fueron el Celta y el Barça los que frenaron al Sevilla de Julen, en esta ocasión fue el Elche de Escribá el que le arrebató el pleno de triunfos. El cuadro franjiverde, en uno de sus clásicos partidos de lucha, fe y resistencia, detuvo a un Sevilla en el que Lamela, por primera vez, no fue suficiente para llevarse la victoria.

Mientras Koundé esperaba desde su domicilio la llamada del Chelsea, el Elche encontró un agujero para marcar su primer gol del curso. Fue Roco, otro central, el que golpeó primero. El Sevilla lo intentó de mil formas, pero jamás dio con la fórmula para sentirse del todo cómodo. A Lopetegui se le atragantó el Elche en una jornada que ya le genera manía. Su asedio final se quedó sin premio.

El Sevilla tardó tres minutos en mostrar una de sus virtudes. El conjunto de Lopetegui huele la sangre del rival, castiga los errores como nadie. En un mal despeje de Roco, Óscar se encontró un balón en la frontal, pero disparó al palo. El Elche estaba avisado y su reacción fue meritoria. En un intervalo de tres minutos dio con el gol después de un pequeño asedio y una buena definición de Roco, el central disfrazado en killer. Antes, Raúl Guti y Diego González, desde fuera del área, probaron a Bono. El meta hispalense se lució, pero en el gol del Elche no pudo hacer nada. Fidel filtró un buen balón a Roco, que no perdonó.

El Sevilla mandaba en casi todo, menos en el marcador. Le costó volver a buscar la portería contraria. Jordán puso a prueba las dudas de Kiko Casilla, señalado ante el Atlético. El meta se sentía firme. En Nesyri seguía a lo suyo, peleándose con los tres centrales del Elche y rematando todo lo que aparecía por el área. El marroquí avisó con un testarazo que pasó rozando el palo. En la segunda que tuvo, no perdonó con una buena definición de cabeza tras un gran falta lateral. El Elche reclamó una falta en el barullo del área, pero el VAR dio validez al gol, confirmando la decisión del colegiado.

El Sevilla tenía el partido donde quería, con empate y con Lucas Boyé, uno de los mejores jugadores del Elche, fuera de combate por lesión. El inicio de la segunda parte empezó con un intercambio de golpes. Fidel y En Nesyri se repartieron don buenas ocasiones. Cuando el Elche parecía tener controlado el partido, Lopetegui agitó el banco y sacó a toda su artillería. Lamela, Papu y Rafa Mir, tres bichos desatados que tardaron un minuto en fabricarse una gran oportunidad que el propio Mir remató a las nubes en una de esas que suele meter casi sin querer.

Pero el Sevilla, pese a cambiar su tridente de ataque, no materializó su dominio en ocasiones claras. El partido pareció morir en la oportunidad fallada por Rafa Mir. El Elche, agotado y con varios jugadores tocados, tiró de orgullo para amarrar un punto tras pasar una pequeña cima y dejar atrás al Athletic, Atlético y Sevilla.