Ligero esbozo del 'primer' Real Valladolid de Pacheta
Al conjunto blanquivioleta se le adivinaron algunas de las características que el técnico quiere implementar en el juego esta temporada.
Los cinco positivos en coronavirus que sufre en sus carnes el Real Valladolid han evitado que Pacheta haya podido disponer de la segunda prueba de pretemporada, prevista para este sábado en Palencia. El abultado 1-9 en Tordesillas, como declaró el propio entrenador posteriormente en rueda de prensa, sirvió para sacar pocas conclusiones. Sin embargo, valió para dibujar un ligero esbozo de lo que pretende el burgalés, cuya plantilla todavía debe cambiar mucho.
1-4-4-2. José Rojo Martín apenas ha dedicado tiempo aún a incidir en aspectos tácticos, por lo que el amistoso de Las Salinas era casi un examen sorpresa. Los efectivos de los que disponía el entrenador le llevaron a utilizar un 4-4-2 mutable por la posición inicial de Zalazar.
Presión alta. Al menos durante la primera mitad, el Real Valladolid mostró ganas de encimar la salida de balón del rival. Esto permitió recuperar varios balones en esa fase inicial y salir rápido en busca de la portería, sobre todo liderados por un Weissman hambriento.
Mucho remate. Unido a lo anterior, el conjunto blanquivioleta acumuló un buen número de remates, gracias también a que acumulaba muchos futbolistas en el último tercio de campo y en buenas posiciones para tratar de incidir de cara a puerta.
Acumulación interior. A falta de extremos puros como Pablo Hervías, los utilizados aparecieron mucho en zonas interiores, sumándose a los dos atacantes. Esto permitió que el Pucela ocupase los pasillos intermedios, entre central y lateral, además del carril del 10.
Laterales ofensivos. De los distintos laterales que tuvieron minutos, Nacho y Olaza fueron los que tuvieron mayor presencia ofensiva, hasta el punto de marcar gol los dos y de provocar un penalti el uruguayo. Por lo anterior, los demás también tenían terreno para cabalgar.
Posesión vertical. El desnivel entre equipos favoreció que el Real Valladolid tuviera el balón casi en exclusividad. Lo amasó más en algún momento, pero sobre todo trató de llevarlo arriba aprovechando los desmarques de ruptura de sus jugadores de arriba.
Salida de tres. Una de las cosas en las que Pacheta hizo hincapié fue en el posicionamiento del mediocentro 'bajo' entre centrales para hacer salida de tres. Se le vio incidir a Roque Mesa en esto y en que mantuviese su posición si un central progresaba.
Cambios de posición. Como reconoció al final el técnico, las circunstancias físicas que atraviesan algunos jugadores provocaron cambios de posición como el de Corral, que jugó como central, o el de Moi Delgado, que arrancó como extremo izquierdo.
Defensa. La zaga dejó alguna tímida duda por falta de automatismos en algunos de esos que actuaron fuera de posición y por las piernas pesadas propias de la pretemporada. Con el recuerdo de la pasada campaña, será un punto en el que incidir.