El Leganés busca destino a Mejías
El central venezolano (23 años) está entrenando sin dorsal. El club ya lo señaló como potencial salida en la preparación del curso. Apunta a una nueva cesión.
El Leganés está buscando destino a Josua Mejías. El central venezolano (23 años) ya se encuentra bajo las órdenes de Asier Garitano, pero tiene complicada su continuidad al sur de la capital por el exceso de centrales que satura el eje de la zaga (con él son cinco) y por su condición de extracomunitario. LaLiga concede sólo dos plazas en Segunda y una de ellas será para Gaku Shibasaki. Se trabaja en la consecución de su nacionalidad, pero no parece que se consumará en este 2021. Lo normal es que acabe marchándose a préstamo.
Mejías (con contrato hasta 2023) ha comenzado la puesta a punto de los pepineros sin dorsal todavía asignado. Sucede lo mismo que Kravets, a un paso de salir cedido al Sporting de Gijón tras el fichaje de Quintillà. Que el venezolano no tenga asignado oficialmente un número es ya señal de que su situación en Butarque es inestable.
No ayuda tampoco que no pueda ser inscrito como futbolista de categorías inferiores, una fórmula que se barajó cuando se presentó oficialmente como jugador blanquiazul, el verano de 2018. Son todos ellos obstáculos ajenos a su voluntad que no le ayudan en su anhelo de seguir al sur de Madrid.
La perspectiva de Mejías viene siendo de una salida a otro destino desde antes incluso de que comenzara la preparación. En Butarque ya lo veían claro después de las reuniones que mantuvieron Garitano y los responsables de la dirección deportiva. Su perfil ya estaba cubierto e incluso en caso de alguna salida de centrales (Omeruo) solo sería candidato de emergencia.
Pero su nueva despedida de Leganés, precisamente por todos esos factores, no será sencilla. Son obstáculos burocráticos que computan también a la hora de incorporarlo a otros destinos de Segunda División, categoría en la que rindió con un buen nivel en el Málaga.
Adiós a las dos últimas opciones de compra
La entidad de Martiricos mantenía una opción de compra de dos millones de euros que ya en el momento de su firma parecía inviable a tenor de las enormes estreches económicas que se asumían en Málaga. Un año antes Mejías formó parte del Atlético de Madrid B.
En el filial se incorporó también con opciones de poder ser adquirido por los colchoneros, pero acabada la temporada no se ejerció la cláusula de compra a la que tenían derecho por un millón de euros. La pandemia frenó su progresión. Aun así, jugó 22 partidos en la ya extinta Segunda B.
Sumando la de La Rosaleda y la del Cerro del Espino, Mejías acumula ya cuatro experiencias lejos de Butarque. A sus etapas rojiblancas y malagueñas hay que unir sus fichajes por el Cartagena (en dos etapas) y por el Nàstic de Tarragona, donde se estrenó en la categoría de plata precisamente en 2018, el año de su fichaje oficial por los pepineros.
Subcampeón del mundo sub-20
Después de una cesión en el Leganés B, el club pepinero lo incorporó por cerca de medio millón de euros, cuantía de su traspaso desde el Carabobo. Una inversión que ahora parece alta, pero que entonces (en Primera) se veía como una opción rentable de futuro.
Mejías arribó a la Avenida de los Once Leones como un jugador con buen futuro después de ser internacional sub-20 con Venezuela. Con La Vinotinto fue subcampeón de la categoría en 2017 frente a la Inglaterra de Kyle Walker, única superviviente de aquella cita en la final de la Euro 2020.