"No sé si serán como Xavi e Iniesta pero tienen calidad, dan miedo"

Claudio Ranieri, como casi todos los italianos, cree en la Azzurra. El técnico habló de los cuartos de final de esta Euro con una columna de opinión en 'La Gazzetta dello Sport', definiendo al Italia-Bélgica como "el partido más abierto". La fuerza de los de Martínez "es su bloque unido", aunque luego hay el brazo (Lukaku), la mente (De Bruyne) y la poesía, Hazard: "Un crack al que le tengo un especial cariño por el gol que le metió al Tottenham hace cinco años, gracias al que fui campeón de Inglaterra con el Leicester". Ranieri desveló una anécdota sobre el madridista: "Fui a visitar a Sarri en el Chelsea y le di las gracias a Eden, nos reímos. Tiene algo especial, el espíritu de un futbolista callejero". Para el entrenador Italia debe imitarle, "pasándolo bien cuando se puede y defendiéndose cuando el rival te obliga a hacerlo". Pase lo que pase, para el ex del Leicester "Italia mostró el mejor fútbol, por continuidad y belleza".

El italiano habló también de los otros cruces. España ahora "da miedo" y sus jugadores "llevan un mando a distancia en los pies". "No sé si estos jugadores serán como Xavi e Iniesta pero hay mucha calidad", añadió. También señaló para la Roja que hay que tener cuidado con la Suiza de Petkovic, subrayando las dotes de Xhaka ("impresionante") y Seferovic, que Italia dejó escapar sin darle tiempo "para absorber la cultura de un nuevo país". 

Dinamarca, por su parte, "tras el susto de Eriksen mostró un fútbol bonito y alegre, una gran reacción", mientras que la República Checa se agarra a Schick, que el entrenador conoce bien: "Coincidimos en Roma y pensé que era una flor que estaba a punto de florecer. Quería que jugara junto con Dzeko, no entendía porque no funcionaban juntos". Por último, Ranieri alabó a Inglaterra: "Los leones han vuelto a ser leones. Sterling la está rompiendo y mi Harry Kane por fin marcó un gol". Con un deseo: "Me encantaría una final Inglaterra-Italia. Ucrania, eso sí, tiene una gran ventaja: no tiene nada que perder y puede jugar tranquila. Eso, en el fútbol, es un recurso enorme".