Gaku se rompe, peligra el playoff y el Leganés suma su séptimo tocado
El medio del Leganés sufre una dolencia muscular. Si se confirma la rotura, llegaría justo para la final de la promoción. Es la cuarta rotura fibrilar de las últimas semanas.
El partido transcurría en la nada de una segunda parte que había comenzado sin tensión cuando ahí, en la nada, se lesionó Gaku Shibasaki. Lo hizo fiel a su personalidad. Sin alzar la voz, ni estridencias. No fue en un golpe, un sprint o una entrada dura. Se lesionó solo. Trotando, para ser más exactos. Avanzaba alejado de la jugada el nipón del Leganés cuando se frenó en seco, cojeó y se echó a suelo. Sobre la pradera de Anduva, un gesto que señalaba la parte posterior del muslo izquierda. Una nueva dolencia muscular que amenaza al Leganés y que podría dejarle sin Gaku toda la temporada, final de playoff incluido.
El futbolista será sometido entre hoy y mañana (dependiendo de la inflamación) a las pertinentes pruebas médicas, pero en condiciones normales, de confirmarse que se trata de una rotura muscular, necesitará el tiempo habitual de recuperación en estos casos: mínimo, tres semanas, “y a partir de ahí, depende del futbolista”, comentó hace poco Garitano sobre las dolencias de Arnáiz y Omeruo. Su reflexión se puede aplicar igualmente a Gaku.
La duda del playoff y las rotaciones
Si los augurios clavan el pronóstico, Gaku no jugaría las dos últimas jornadas, se perdería las hipotéticas semifinales de la promoción y, si el Lega se clasifica para la final, llegaría justo al duelo de vuelta. Un drama. Porque el japonés lo estaba jugando todo una vez se ganó la confianza de Garitano para adelantar a Rubén Pardo.
Quizá esa persistencia en usarlo con frecuencia sin darle descanso (acumulaba cinco titularidades consecutivas y sólo en una no jugó el partido completo) es una de las razones por las que el nipón se rompió en Anduva. Además, entre el partido precedente (domingo noche ante el Logroñés) y el choque de Miranda de Ebro apenas pasaron 48 horas. La duda está ahí, aunque Garitano ha defendido en las últimas semanas que los parámetros que maneja el club habla de un equipo en buen estado físico.
Con todo y con eso, las lesiones musculares se han cebado en las últimas semanas con el equipo. A saber: Borja, Omeruo, Arnáiz y el propio Gaku se han roto. Dolencias que unirse a los problemas de Ignasi Miquel (cerca de la recuperación) y Bustinza (más complicada) y la baja de Lasure. Siete ausencias, mínimo, para el próximo partido del Leganés ante el Málaga (lunes, 21:30), penúltimo de la temporada y choque clave para seguir peleando por el anhelo de ser tercer clasificado en Liga.