Pellegrini y Pacheta cruzan sus caminos hacia el paraíso
El Betis quiere atar una plaza en Europa y el Elche acercarse a la permanencia. Los técnicos de ambos equipos convirtieron con su trabajo dos utopías en objetivos reales.
El fútbol siempre abre puertas a los sueños y en el Villamarín se miden los de Betis y Huesca bajo la sensación de haber superado utopías para fabricar objetivos que ahora están al alcance. Hay dos grandes culpables en ello: Pellegrini y Pacheta. El primero elevó el nivel de un plantel que había rozado el desastre en el pasado reciente y el segundo desafió las matemáticas desde que llegó para acariciar una salvación que se antojaba perdida. Dos desafíos a lo imposible. Europa y la permanencia a tiro de piedra (sigue el partido en directo en As.com).
El Betis no quiere hacer demasiadas cuentas, pero puede atar hoy su regreso a Europa. No se conforma con ello, sino que pretende hacerse con la quinta o sexta plaza para que su destino continental sea la Europa League. Depende de sí mismo mientras mira de reojo lo que hacen Villarreal y Real Sociedad. Para el Huesca, la cita del Villamarín puede ser crucial en su aspiración de evitar la quema: sumar le mantendría fuera de la zona de descenso.
Hay en la escena esperanzas y temores. El Betis suma nueve partidos consecutivos sin perder, aunque sólo logró dos victorias en esa concatenación. Pellegrini lamenta que no esté presente la afición en esta cita mientras confía en que las sensaciones y el estado anímico de los suyos son cruciales para atar una de las plazas continentales. Para el Huesca, la misión es depender de sí mismo en la última jornada. Habrá miedos, quizás muchos, sobre el césped del Villamarín.
Pellegrini y Pacheta mandan. Pero las líneas claves las dibujarán los jugadores. Mandi, con su futuro atado por el Villarreal, podría regresar a la zaga del Betis en pleno debate sobre el rendimiento de Bartra. ¿Qué dilema priorizará el técnico? El que seguro que volverá al once será Canales, que tratará de dirigir el fútbol verdiblanco tras la mala actuación colectiva ante el Eibar. Aitor Ruibal es otra de las vías que maneja Pellegrini para dar más carácter a los suyos.
El Huesca tirará de su receta perfeccionada, la que le entregó sus dos últimos triunfos, con Sandro y Rafa Mir en un ataque que resultó vital para llegar con vida hasta este cierre. No tocará Pacheta lo que viene funcionando y de ahí parte su renovada candidatura a la gloria. Hoy Betis y Huesca dirimen una dura batalla entre pretensiones que parecían imposibles y ahora resultan casi obligadas.