El talento de Brais mantiene vivo el sueño europeo del Celta
El mediapunta de Mos adelantó a los vigueses con un gol exquisito. Solari sentenció con su primer gol en LaLiga. Tapia, Aspas y Murillo acabaron lesionados.
La música de Misión Imposible sigue sonando en el vestuario del Celta. Los de Coudet se niegan a apagar esa canción que les traslada a Europa, se resisten a abandonar un sueño que las matemáticas todavía no le niegan. Esta vez el talento de Brais fue suficiente para liquidar a un Levante en caída libre, que sufrió en Balaídos su cuarta derrota consecutiva, la sexta en las últimas siete jornadas. El descenso todavía queda lejos, pero no deben despistarse. Eso sí, los celestes pagaron una factura millonaria por el triunfo, con las lesiones musculares de Aspas, Tapia y Murillo.
El partido comenzó con ritmo, con un constante intercambio de acercamientos al área, que no de golpes. Las primeras ocasiones se generaron, eso sí, enseguida, en cuanto Aspas y Denis empezaron su batalla particular por ser el mejor asistente de LaLiga. Nolito impidió que el moañés se consagrara en el liderato al desaprovechar su genial pase. El sanluqueño no supo enfilar el balón hacia la red cuando tenía todo a su favor. Poco después fue el propio Aspas quien le negó a Denis un nuevo pase de gol. El servicio del ex del Barça fue sensacional, con precisión cirujana, y el diez céltico quiso culminarlo con una definición a la altura. Intentó sorprender a Cárdenas con un sutil toque de vaselina, pero el meta granota no perdió la compostura y venció en el duelo.
La réplica visitante llegó de la mano del debutante Cantero, quien le rompió la cintura a Aidoo y enchufó un buen disparo que estuvo a punto de colarse por la escuadra. Jaime Latre cogió el testigo del protagonismo al filo del descanso. Señaló penalti por un leve contacto de Duarte sobre Mina y el VAR anuló la acción por fuera de juego, aunque antes fue a verla al monitor situado a pie de campo.
El segundo tiempo comenzó con dos acciones que definieron el partido, una en cada área. Roger falló en boca de gol, al rematar mal un genial centro de Clerc que había prolongado Cantero. En la siguiente acción, sucedió todo lo contrario. Aspas filtró un pase milimétrico para que Brais definiera con una sutileza exquisita. Un gol construído por dos genios zurdos creados en A Madroa. Una delicia.
El tanto dejó noqueado al Levante y Brais estuvo a punto de replicar el primer gol. Araújo se vistió esta vez de Aspas y Cárdenas salvó con el pie otro sutil toque del mosense. Sentenció después Solari en la recta final, al culminar una buena combinación entre Nolito y Aarón Martín. La jornada marcará el destino de ambos equipos, aunque en Vigo miran ahora hacia la enfermería para saber qué les sucede a los tocados. Su presencia en la recta final de LaLiga es clave para seguir soñando.