Más motivos para quejarse que los de José Gomes en su día

No se olvida la rajada del técnico del Almería tras el empate de su equipo frente al Leganés hace apenas un mes. José Gomes descargó su rabia en la sala de prensa después de que el colegiado López Toca señalase penalti en contra de su equipo en el tiempo añadido. Una acción que propició el empate del conjunto pepinero. De igual manera, y con más motivos, pudo actuar ayer el entrenador del Mirandés, que se tuvo que morder la lengua una vez finalizado el partido. Eso sí, José Alberto López dejó un recado a su homónimo en el banquillo almeriense: “Acabo de ver la jugada. Entiendo que los árbitros tienen una labor muy difícil. Quien no llora, no mama pero yo no lo voy a hacer. No pudimos ganar porque enfrente había un equipazo. Fue un partido de toma y daca, aunque esa jugada lo marcó”.

Nadie entiende que el extremeño Hernández Maeso ni siquiera revisase la acción en el VAR, sobre todo porque es evidente que el esférico golpea en el rostro de Pablo Martínez. “No sé si ellos tendrán otras, pero en ninguna de las imágenes de televisión se ve que el balón le pegue en la mano. No es ninguna crítica, pero sí me gustaría que haya un criterio para el tema de las manos. Hoy es evidente porque no toca el balón, pero en unos partidos se pitan manos y en otros no. No sabemos ni cómo actuar. Me gustaría que nos aclarasen ese tema“, apunta el míster asturiano.

El técnico asturiano se centró en destacar el buen trabajo de sus jugadores que, por momentos, maniataron a un gran rival: “No vamos a bajar los brazos. El equipo hizo un gran partido. Todo el mundo está metido. Hay jugadores que se han quedado a trabajar porque acumulan días de mucha inactividad. Eso habla de su compromiso. Así se alcanza el éxito. Tuvimos situaciones para marcar algún gol más. Ellos plantearon un partido para jugar a la contra, pero supimos interpretar el encuentro muy bien”.