Puntilla o esperanza para el Eibar en el derbi guipuzcoano
La Real Sociedad, con muchas bajas, no está para regalar nada: defiende la quinta plaza y no han ganado esta jornada ni Betis ni Villarreal, sus rivales directos
Ipurua alberga tal vez el último derbi guipuzcoano en la élite hasta nueva orden. El Eibar, un colista a siete puntos ya de la permanencia, apura en el cierre de la jornada sus últimas opciones de permanencia ante una Real Sociedad que defiende la quinta plaza y trata de aprovechar que sus rivales directos Betis y Villarreal no han ganado el fin de semana (sigue el partido en directo en As.com).
Mendilibar ha convocado a todos menos Bigas, que se recupera de una lesión en el recto anterior. Eso no significa que estén ya aptos Expósito, Correa y Muto, que andan tocados. La duda es si rehabilitará a Sergi Enrich, que la pasada semana se quedó sin viajar contra el Granada como castigo. El técnico le lanzó un buen recado: "No ha venido por decisión técnica. No le veo bien y se ha quedado en casa. Se podía haber quedado algún otro también. Ves un poco los entrenamientos, la forma de estar en el grupo y tomas decisiones. Con él también hemos perdido. Lo normal es echar en falta a quien no está cuando se pierde, pero creo que no es el caso". Curiosamente en la primera vuelta Sergi Enrich fue el autor del gol del empate (1-1), rompiendo una racha de 358 días sin marcar. Tal vez reciba una oportunidad para que demuestre que está rabioso.
El caso es que los armeros se ven obligados a lograr en Ipurua su segunda victoria de la temporada. Los números en el fortín armero, hasta este año inexpugnable, son sonrojantes. Al menos saben que se les da bien la Real, ya que en su campo han ganado al vecino en cuatro ocasiones, han empatado en dos y han perdido un derbi, el de la pasada temporada.
No se prevén grandes cambios en el esquema de Mendilibar, que contará con sus jugadores habituales en las últimas semanas, aunque todo de pende de cómo esté Expósito, porque es un jugador clave y la ocasión merece que fuerce.
La Real defenderá la quinta plaza que recuperó la última jornada, lastrada por las bajas ante un vecino al que puede dar la puntilla. Hasta Imanol ha esgrimido que le da pena, pero se juegan muchísimo. Los donostiarras tendrán que olvidarse de sentimentalismos y fijarse en sus propios intereses europeos. A la resistencia habitual de los azulgrana en este tipo de choques se suma el precario estado físico de buena parte de la plantilla txuri urdin.
Siguen sin contar con David Silva, el que lleva la brújula en la zona de creación, aunque la Real demostró ante el Celta que también puede sobrevivir sin el mago canario. No están tampoco Merino, Muñoz e Illarramendi, lesionados, y la situación se agrava con la sanción a Elustondo, por acumulación de tarjetas, al igual que a Carlos Fernández, que realizó el jueves su mejor partido con la camiseta blanca y azul.