NewslettersRegístrateAPP
españaESPAÑAchileCHILEcolombiaCOLOMBIAusaUSAméxicoMÉXICOusa latinoUSA LATINOaméricaAMÉRICA

SUPERLIGA

Cómo el patinaje puede determinar la Superliga

La Unión Internacional de Patinaje tuvo una sentencia en contra sobre en qué competiciones participaban o no los deportistas.

Cómo el patinaje puede determinar la Superliga
DIARIO AS

Los doce fundadores, más tres que se espera que lleguen, decidieron alterar este domingo el planeta fútbol anunciando la creación de la Superliga Europea. El nuevo torneo continental ha causado conmoción desde la cima hasta la base de la pirámide, pronunciándose cada uno en su foro, desde la FIFA hasta el último aficionado. A nadie deja indiferente y su popularidad es, cuanto menos, discutida. 

Según los fundadores y dueños, la viabilidad económica está asegurada, con un reparto de premios mayor que el de la UEFA ahora en sus competiciones generando, en teoría, más beneficios para sus participantes, que ahora están más en duda que nunca después de las renuncias de los clubes ingleses, el Inter y la próxima salida de Milan, que aún no se ha oficializado. 

El dinero está a través de fondos de inversión, pero necesitan la complicidad de FIFA y UEFA, que ya se han alienado completamente en contra de la iniciativa. Si siguen adelante, a pesar de todo, los jueces podrían ser quienes decidan cual de los dos proyectos puede seguir adelante o si se ven obligados a convivir.

Una de las principales amenazas de UEFA fue el veto a los clubes y los jugadores, pero ahí, la jurisprudencia podría favorecer a los miembros de la Superliga y también, a sus jugadores. El problema son las normas de elegibilidad y su convivencia con la regulación sobre Competencia en la Unión Europea. El patinaje sobre hielo de velocidad podría condicionar su futuro. 

Competencia y competir para terceros

El caso sucedió en 2014 cuando una empresa surcoreana quiso organizar unas pruebas de patinaje sobre hielo de velocidad en Dubai. Unas pruebas que no fueron organizadas en este caso por la Unión Internacional de Patinaje y que no autorizó, lo que impidió que se llevara a cabo el evento. Si algún patinador federado hubiera participado se exponía a una exclusión de por vida al no estar la competición bajo el amparo de esta organización.

Dado el caso, dos patinadores profesionales neerlandeses decidieron denunciar y la Comisión Europea decidió en 2017 que las normas de dicha federación internacional chocaban de plano con las normas de competencia de la Unión Europea impidiendo que los deportistas participaran libremente en las pruebas organizadas por terceros privando a esos terceros de los servicios necesarios para llevar a cabo dichas competiciones.

Así, la UIP llevó al Tribunal General de la UE esta decisión y este dictó en diciembre de 2020 que la federación está obligada a velar por los intereses de otros organizadores y que estos no se vean privados de un acceso al mercado, "falseando" así la libre competencia. Este argumento, según fuentes legales consultadas por este diario, podría ser uno a los que se agarrará la Superliga como organización para llevar a cabo el proyecto.

Además, la UIP también se vio afectada en lo que conlleva a los patinadores debido a la severidad de las sanciones. Esta sanción de por vida entienden que era tan severa que alejaba de cualquier competición de un tercero al deportista, "aunque ningún motivo legítimo lo justifique". Es decir, que la UIP 'controlaba' donde y cuando competían los patinadores a través de un castigo duro.

Ese fue visto como desproporcionado por el Tribunal General, que obligó a modificar su conducta a la federación. Mientras le reconoció la legimitidad para velar por el bien de la competición (estándares, riesgos de apuestas...) y elegibilidad, considera que en este caso se excedió en el castigo y consideraba que la norma no se ajustaba a los objetivos. Aseguraba que estas normas "tal y como habían sido concebidas y aplicadas" acababan con la competencia. Un argumento que también podrían presentar los jugadores en caso de verse excluidos de la Eurocopa, según explican fuentes legales a este periódico.

En esta misma línea de defensa legal del proyecto se ha mostrado Andrea Agnelli, presidente de la Juventus, en una entrevista con la Reppublica. "Temo más que se produzca una situación de monopolio con un intento de impedir que los clubes y los jugadores ejerzan sus libertades recogidas en el Tratado de la UE. Tenemos que salir de esta sitaución de monopolio en la que nuestros reguladores son nuestros rivales. Es un ejercicio de libertades", aseguró el mandatario turinés. 

Un arma de doble filo

Esta sentencia, sin duda, puede funcionar para defender los intereses de una parte, pero también de la la otra. Mientras la Superliga tendría esta sentencia a su favor, Irene Aguiar desde IuSport cita el caso Meca-Medina asegurando que las normas que regulan el deporte puede quedar excluidas en ocasiones del derecho de competencia de la UE y que si un Tribunal considera que las normas son proporcionadas y tienen un fin legítimo no interferirían en el derecho. 

Dos casos aplicando al mismo principio de competencia que acabaron con un resultado distinto. Jurisprudencia para ambos en una lucha que podría llegar pronto a los Tribunales.