El Logroñés necesita resurgir para escapar del descenso

La primera temporada de la Unión Deportiva Logroñés en Segunda es de todo menos aburrida. Los blanquirrojos y el Almería poseen la mejor racha de victorias consecutivas de la categoría, con seis. También se encuentran igualados con el Zaragoza a la peor dinámica sin sumar tres puntos, con doce partidos. Hoy reciben al Tenerife con la intención de cortar esa espiral tan negativa, que les ha llevado a convertirse en el equipo con la diferencia de goles en contra más abultada: -19. En las últimas 19 jornadas sólo han conseguido un triunfo (el 2 de enero, 2-1 al Mirandés), ninguno en la segunda vuelta, y totalizan diez de 57 puntos posibles. Y, por sorprendente que resulte, continúan fuera del descenso gracias a su imponente noviembre.

La zona baja se aprieta… y a los riojanos les urge ganar. Frente al Zaragoza y la Ponfe no pasaron del empate, aunque empezaron por delante en el marcador y subieron el nivel en defensa y en ataque, con una intensidad y un acierto prácticamente desaparecidos en combate desde que el Mallorca les frenara a las puertas de diciembre. Sergio Rodríguez repitió alineación en ambos choques, y quizás ocurra de nuevo, lo que demuestra la importancia de esta semana. Resurgir y coger oxígeno; caer y más dolor. Iñaki, autor de los dos tantos en El Toralín, Paulino y Nano Mesa pondrán el peligro arriba, y Bogusz, después su convocatoria con Polonia Sub-21, y Pacheco pueden regresar a la lista para aportar mayor desborde y alternativas. Si Sergio cuenta con ellos. Leo Ruiz, MVP de noviembre, dispone ahora de un rol secundario. En la enfermería sólo quedan Santamaría, Errasti y Clemente, pero una amarilla acarrearía suspensión para cinco futbolistas: Bobadilla, Petcoff, Andy, Iñaki y Siddiki.

Mientras, el campamento base de los 50 puntos, descripción muy atinada de Martín Marrero hace varios años, se trata del primer objetivo del Tenerife. De vencer en Las Gaunas, los blanquiazules encarrilarían la permanencia y mirarían con otros ojos el tramo final, en el que intentarán (aunque no parece fácil) cazar el playoff. Por eso, la victoria se considera fundamental, a pesar de que fuera de casa a los de Ramis les cuesta más imponerse. Para esta ocasión, el técnico tiene que realizar cambios en su defensa, ya que los dos centrales titulares en el derbi (Carlos Ruiz y Sipcic) están sancionados, por lo que todas las papeletas apuntan a Alberto y Bruno Wilson. El resto del once no debería sufrir demasiadas alteraciones, pero alguna puede haber. Sam Shashoua viene pidiendo pista cuando entra desde el banquillo, al igual que Valera. Los dos son unos jugones, aunque Ramis no termina de verles de inicio. Lo que debe acabar es la racha sin ganar del Logroñés si pretende esquivar problemas gordos.